Totalmente de acuerdo con las palabras de Jorge Nuñez Padin, con respecto a los Super Etendard ( SUE y SEM )
Los compro el Estado Argentino a través del Ministerio de Defensa para la Armada Argentina para uso del Comando de Aviación Naval. Con recursos, provenientes del presupuesto de defensa, con dinero de los impuestos de los ciudadanos. Para contribuir a la defensa de los intereses de la Nación. Los aviones de combate más modernos y mejor equipados con que cuenta la Nación, la única capacidad de ataque anti superficie con misiles, por más que sean de una generación anterior. Con un legado único a nivel mundial, de experiencia en combate y destrucción de naves enemigas . En cuatro años no han sido capaces de ocuparse del tema y de asignar una pequeña partida presupuestaria. Obviamente, porque hay otras necesidades más urgentes como hospitales, escuelas, desnutrición infantil, etc. Por eso, por un tema de prioridad de asignación de recursos, se compran helicóptero presidencial de última generación, un avión presidencial de U$$ 23 M, penes de madera, pensiones contributivas a transgeneros. Si hay un plan para destruir las FF.AA., que no se note.
Los compro el Estado Argentino a través del Ministerio de Defensa para la Armada Argentina para uso del Comando de Aviación Naval. Con recursos, provenientes del presupuesto de defensa, con dinero de los impuestos de los ciudadanos. Para contribuir a la defensa de los intereses de la Nación. Los aviones de combate más modernos y mejor equipados con que cuenta la Nación, la única capacidad de ataque anti superficie con misiles, por más que sean de una generación anterior. Con un legado único a nivel mundial, de experiencia en combate y destrucción de naves enemigas . En cuatro años no han sido capaces de ocuparse del tema y de asignar una pequeña partida presupuestaria. Obviamente, porque hay otras necesidades más urgentes como hospitales, escuelas, desnutrición infantil, etc. Por eso, por un tema de prioridad de asignación de recursos, se compran helicóptero presidencial de última generación, un avión presidencial de U$$ 23 M, penes de madera, pensiones contributivas a transgeneros. Si hay un plan para destruir las FF.AA., que no se note.