Semana clave para la fragata: se rechaza juicio y van a Hamburgo
EL GOBIERNO NO RECONOCERÁ LA CAUSA EN EL TRIBUNAL DE GHANA. HOY JUEZ DEFINE SI SE MUEVE EL BARCO
Por: Carlos Burgueño
Susana Ruíz Cerruti
Será una semana clave para el destino de la fragata Libertad: tres acciones determinarán el futuro del buque y las posibilidades de su liberación en el puerto ghanés de Tema. En el tribunal de Richard Adjei Frimpong, hoy se decidirá si se debe mover el buque a un costado menos comercial del puerto y el viernes será el turno de resolver si se le pagan o no los u$s 30 millones al fondo buitre NML. También la Argentina intentará introducir desde hoy el caso en la Corte Internacional de los Derechos del Mar en Hamburgo, abriendo un nuevo capítulo en el conflicto e introduciendo a las Naciones Unidas abiertamente en su resolución.
Esta mañana, Frimpong llamará a las partes para anunciar su decisión sobre el pedido de la
Autoridad Portuaria de Ghana para que la Libertad sea corrida del puerto, hacia el norte o el sur, para que no moleste el tránsito comercial de las instalaciones. La Argentina no se presentará como país ya que la decisión oficial es la de no dar cabida al juicio, y no reconocer como válida, la acción iniciada por el fondo que maneja Paul Singer.
Se descarta que el juez decidirá que se mueva el buque, con lo que se abrirá un nuevo conflicto: la Argentina, que no reconoce el caso oficialmente, deberá dar como Gobierno la orden a los 45 tripulantes para que muevan el barco. Si no la da, Ghana debería anunciar la acción por la fuerza.
En el mismo tribunal,
el viernes se cumplirá además el plazo que Frimpong le impuso al país para que liquide el monto exigido (u$s 30 millones) para liberar la nave. Como el dinero no es caución (que permanezca en una cuenta de un banco ghanés), sino que el juez determinó que se le deberá pagar al fondo buitre, la Argentina tampoco se presentará como litigante o acusado. Con eso caería el pedido del juez y comenzaría formalmente el juicio. Según los cálculos que en su momento llegaron a la Argentina, éste demandaría años en resolverse en los tribunales ghaneses. Igualmente, para el Gobierno de Cristina de Kirchner no es cuestión judiciable con lo que no se reconocerá el litigio.
El movimiento oficial, que se confirmará probablemente hoy, es recurrir a la Corte Internacional de Hamburgo, tal como adelantó este diario, donde el tribunal de 21 miembros determinaría si se violó o no el tratado por los Derechos del Mar y otras convenciones mundiales que regulan el tránsito y el comercio marítimo. Según la visión argentina, compartida por la mayoría de los juristas locales e internacionales consultados, la Corte podría fallar en contra de Ghana, independientemente que se trate de una cuestión judicial y no una decisión de Estado,
ya que la letra del Tratado habla claramente de la imposibilidad de embargar buques de guerra o unidades oficiales.
El problema de este paso es que Ghana también debería aceptar ir a litigar a un tribunal internacional, porque un juicio de este tipo trae gastos económicos importantes que debe pagar el perdedor en la mayoría de los casos y cuando la culpabilidad es clara (podría ser el caso de la Libertad).
La encargada de llevar el caso en la Corte de Hamburgo será
la consejera legal de la Cancillería, Susana Ruiz Cerruti, experta en este tipo de estrategias. Excanciller de la última parte del Gobierno de
Raúl Alfonsín, esta diplomática de carrera, ya trabajó en cuestiones de este tipo durante la gestión Kirchner, cuando inició en 2006 el juicio contra Uruguay por la radicación de la pastera Botnia en la Corte Internacional de La Haya.
Lo que habría quedado ya cerrada es la posibilidad de éxito en la gestión que a título personal prometió el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, ante el Gobierno de
John Dramani Mahama.