Ante todo, coincido con algunas opiniones expresadas por
@tanoarg así que no las repetiré.
El efecto en el desarrollo de esta guerra parece minímo.
Pero me parece que hay que hacer una distinción entre el buque de desembarco y el submarino.
El buque de desembarco es de bajo valor actualmente y en el futuro previsible. Durante el primer mes de la guerra se desplegó la fuerza de asalto anfibio para distraer el esfuerzo defensivo ucraniano y, eventualmente, proyectarse sobre alguna playa ucraniana, siendo el aparente objetivo de maxima ocupar Odessa.
Pero ese optimismo ruso inicial parece haber sido abandonado. Toda la flota de asalto anfibio regreso al resguardo de sus puertos y nunca más volvió a navegar.
Se podría decir q ue esta fuera de combate desde mucho antes de este ataque.
Este ataque concreto no cambia eso.
Alguno puede contraargumentar que esto evita que en algún futuro indefinido Rusia retome sus ideas de realizar una asalto anfibio. Pero esa posibilidad se ve tan lejana en el tiempo de las probabilidades, tantas lunas se tienen que alinear, que no parece un contraargumento de mucho peso. Si no sucedió en el primer mes de la contienda, parece difícil que suceda en el futuro.
Otro detalle adicional es que no dejan de ser un LST del proyecto 775. Es decir, bastante pequeño y antiguo. Uno más de una flota anfibia bastante más grande.
Así que el ataque al buque anfibio sólo tiene efecto simbólico y sólo desde lo simbólico, la propaganda, puede ser analizado.
El ataque al submarino de ataque si me parece más relevante y requiere un análisis independiente.
Contrario a lo que se parecía al principio de la contienda, la información disponible nos estaría indicando que el Mar Negro no esta completamente controlado con Rusia.
Es, más bien, un espacio en disputa.
Los submarinos de ataque son el sistema de armas estrategico más importante para negar el uso del mar por cualquier rival. Lo cual es especialmente valido para un área en disputa donde otros sistemas de armas no pueden ser tan sigiloso ni disuasivo como un submarino.
Parece que cada vez más Rusia necesita una persistente presencia de submarino tratando de negar el uso Del Mar Negro. No uno, sino varios submarinos permanentemente navegando. Y como tiene que ser una misión persistente en el tiempo, una cantidad igualmente importante de submarinos en mantenimiento y reaprovisionamiento preparándose para sustituir a los submarinos que terminan sus patrullas.
Si la flota de submarinos rusa en el Mar Negro esta muy exigida por la necesidad de negar el uso del mar al adversario, entonces cualquier perdida aquí es preocupante para los rusos.
El submarino atacado sería, además, uno de los más modernos de que dispone la armada Rusa. Así que la perdida es más dolorosa, por más de que no sea nuclear.
Creo que la capacidad de estos submarinos de lanzar misiles cruceros es secundarias. Tampoco es determinante para la guerra. Es mucho más eficiente lanzar misiles cruceros desde buques. Y aún más eficiente lanzar desde tierra y aviones. Así que el valor estrategico de lanzar misiles desde submarino en esta etapa del conflicto es poco significativa.
No hay que prestar atención a los misiles cruceros que pueden lanzar estos submarinos. Sino que hay que prestar atención a las minas, los torpedos y los misiles antibuques que pueden portar. Son este tipo de submarinos los que pueden negar el disputado Mar Negro.
Hay que prestar atención a cómo estás acciones (y varias otras, porque con este único ataque difícilmente sea suficiente) ponen en riesgo y/o socavan la capacidad rusa de controlar el disputado Mar Negro.
Dicho todo esto, vale aclarar, que si eventualmente tienen éxito los ucranianos y sus aliados en socavar la capacidad rusa de controlar o negar el uso del Mar Negro, no necesariamente significa una victoria ucraniana. Porque socavar las capacidades adversarias de negar el uso Del Mar no se traduce simétricamente en una mejora del uso propio de la zona disputada. En el mejor de los casos, lo cual no sería menor, es que ambas partes tienen éxito en negarle a su rival la libre navegación.
Parece que el Mar Negro va camino a ser mar de ninguno. Lo cual si sería una derrota rusa en un nivel geoestrategico significativo. Aunque Ucrania no necesariamente podría aprovechar eso, indudablemente para varios aliados de Ucrania esta sería la mejor de las noticias.