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PUERTO BELGRANO - Unidades y efectivos de la Flota de Mar, Infantería de Marina, Aviación Naval y Fuerza de Submarinos realizaron la semana pasada el ejercicio Anfibio III, en la zona de El Rincón.
El adiestramiento fue planificado por el Comando Naval Anfibio y Logístico, la Fuerza de Infantería de Marina de la Flota de Mar y la Aviación Naval embarcada, todos con dependencia operativa del comando de la Flota de Mar.
Se llevó a cabo entre el lunes 5 y el jueves 8, al oeste del faro El Rincón y al sur del faro Recalada a Bahía Blanca (Monte Hermoso) y participaron el transporte rápido ARA "Hércules", el buque logístico ARA “Patagonia”, el aviso ARA “Teniente Olivieri", la corbeta ARA "Robinson", el buque multipropósito ARA "Punta Alta" y el transporte ARA "Cabo de Hornos".
La fuerza de desembarco estuvo integrada por el Batallón de Infantería de Marina Nº 2, que contó con el apoyo de los batallones de Comando y Apoyo Logístico, Artillería de Campaña, Vehículos Anfibios, Comunicaciones y Antiaéreo, además de la Compañía de Ingenieros Anfibios y la Agrupación de Comandos Anfibios.
El ejercicio contó además con un grupo operativo de la Agrupación de Buzos Tácticos, dependiente de la Fuerza de Submarinos.
También operaron aviones Turbo Tracker, Súper Etendard y Pilatus Porter, junto a helicópteros Sea King y Alouette, de la Fuerza Aeronaval Nº 2 y dos Turbo Mentor de la Fuerza Aeronaval Nº 1.
La acción
El ejercicio Anfibio III consistió en la incursión de la fuerza de desembarco para el rescate de personal de Naciones Unidas, en una zona de hipotético conflicto bajo mandato del Consejo de Seguridad de ese órgano supranacional.
La situación meteorológica impuso severas condiciones a la operación y a la maniobra de las unidades en tierra, aire y mar.
Incluyó incursiones de comandos anfibios paracaidistas, relevamiento de la playa por parte de los buzos tácticos y el consiguiente desembarco de dos compañías en botes MK5, en la zona de la rada de Monte Hermoso.
Mientras tanto, buques llevaron a cabo maniobras de reabastecimiento en el mar pese al fuerte oleaje imperante y de apoyo logístico a la fuerza de desembarco.
Helicópteros y aeronaves de ataque realizaron tareas de reconocimiento armado y apoyo aéreo cercano controladas por los elementos de maniobra.
Durante la noche, los buques realizaron ejercitaciones de tiro antiaéreo simulado y transferencias de comandos anfibios en alta mar que demandaron un gran esfuerzo y pericia marinera en virtud del oleaje.
La operación continuó con una gran variedad de acciones de apoyo operativo y logístico, desembarco helitransportado, movimiento de batallones en el terreno, fuego naval de apoyo, visita-registro-captura, ejercicios antipolución, lanzamiento de misiles antiaéreos y relevamientos tácticos e hidrográficos.
No tripuladas. La fuerza de desembarco contó con el apoyo de aeronaves no tripuladas (UAV, por sus siglas en inglés) cedidas a prueba por la empresa Nostromo-Defensa. Los UAV sirvieron a la exploración de las compañías, de las acciones de comandos anfibios, al tiro de artillería y hacia el final del ejercicio para evaluar las acciones a adoptar en diversos focos de incendio que se produjeron en el polígono.