Tras el operativo de esta mañana
Jefe de GEOF: "Novaro no nos mató de milagro"
Claudio Pereyra, jefe del Grupo Especial de Operaciones Federales, aseguró que el abogado les disparó con un fusil M16 y que "estaba muy bien preparado para defenderse".
El jefe del Grupo Especial de Operaciones Federales (GEOF) que hoy realizó el asalto táctico en la casa de Gabriel Novaro, aseguró que el abogado no los mató "de milagro" y que "estaba muy bien preparado para defenderse".
En diálogo con la agencia Télam, el comisario Claudio Pereyra dio detalles de cómo fue el operativo que terminó con Novaro herido de gravedad y explicó que no tuvieron otra alternativa porque el abogado les disparó con un fusil M16, como los que utiliza el ejército norteamericano.
Sin dar muchas precisiones, para no develar su metodología de trabajo, Pereyra explicó que "se irrumpió con dos grupos tácticos y en total se hicieron cuatro disparos".
El comandante del GEOF explicó que Novaro estaba "parapetado en un entrepiso de su casa, donde tiene una mesa de pool, detrás de una "tronera" o falsa ventana desde donde tenía visión de la planta alta y de todas las entradas de su casa".
"Además, había colocado allí un espejo muy grande para poder tener una visión retrospectiva del acceso trasero. No tenía chaleco antibalas pero sí una máscara antigases y además monitoreaba con cuatro cámaras los movimientos externos de la policía", indicó.
El comandante del GEOF señaló que pese a que se le había cortado la luz, " la casa contaba con un equipo de electricidad autónomo" y que por ese motivo neutralizaron las cuatro cámaras de seguridad externas "disparándoles con silenciador".
"Realmente estaba muy bien preparado para defenderse y no nos mató de milagro, porque cuando entramos nos disparaba con el fusil M16", sostuvo Pereyra.
El comisario, que participó personalmente de la irrupción al domicilio, explicó que con los primeros dos disparos destruyeron "el espejo para que no tenga la visual trasera y, como disparaba contra el personal, se le efectuaron a él otros dos tiros".
Pereyra explicó que sólo acertaron uno de esos balazos "en la cadera porque Novaro estaba en movimiento" y que el arma con la que
el GEOF baleó al abogado es un fusil Sig, modelo comando con mira laser, calibre 5,56 con "balas expansivas", un tipo de munición especialmente diseñada para que entre en el blanco pero no salga, para evitar lesionar a eventuales rehenes o terceros.
Por último, precisó que además de ese fusil de asalto "con tres cargadores preparados", Novaro tenía en su poder "una pistola Glock calibre nueve milímetros con cargador de 30 balas y otra Pietro Beretta calibre 6,35".
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