Los aciagos helicópteros:
Los 8 helicópteros eran, literalmente, la pieza clave de la operación. Ellos habían despegado desde el USS Nimitz a unas 58 MN fuera de la costa iraní, según el cronograma se dirigieron al norte hacia Desierto Uno a 865 MN.
Tenían 9 horas y 16 minutos de oscuridad y luna llena.
La ruta prevista
Cerca de las
2145 hs (2 hs 40 min de vuelo) el
helicóptero N° 6 indicó una falla catastrófica que requería abortar el vuelo. La tripulación aterrizó, confirmó el problema, removió documentos sensitivos y luego
fueron recogidos por el helicóptero N° 8 que siguió a los otros con unos minutos de retraso.
Un helicóptero menos y los problemas recién se iniciaban.
Cerca de
1 hora después los helicópteros restantes siete RDH 53 entraron en una severa y totalmente inesperada tormenta de arena; todos salieron indemnes de ésta, volaron por 1 hora más y se encontraron con una segunda y aún peor tormenta de arena. (Lo que encontraron era un
Haboob, un fenómeno meteorológico en el cual la visibilidad es nula. Estas tormentas empujan masas de polvo y arena por muchos kilómetros. En Irán, donde el polvo es extremadamente fino, un haboob puede permanecer en el aire por horas).
Aquí puede verse la magnitud de un
Haboob:
http://www.youtube.com/watch?v=fNOOVDNUDOQ&feature=related
El Cte de la Fuerza de helicópteros – Mayor Seiffert USMC- había perdido su sistema de navegación inercial al principio del vuelo y, completamente ciego, voló retrocediendo hacia primer tormenta de arena y aterrizó, acompañado por el helicóptero número 2. El Mayor Seiffert tenía un enlace seguro por radio con el COMJTF, quien le informó que
el tiempo en Desierto Uno era despejado; en consecuencia después de 20 minutos en tierra ambas aeronaves despegaron y siguieron a las otras a Desierto Uno,
Mientras tanto el
helicóptero número 5 sufrió varios problemas, incluyendo la pérdida de su giróscopo, un incendio en su sistema de navegación táctico y una falla en el sistema de recepción de su radar. Sin horizonte artificial ni guía, y con montañas por delante,
el piloto consideró conveniente abortar y regresar al Nimitz, estaba apenas a 20 minutos de llegar a destino.
Quedaban 6 helicópteros para continuar la misión. Y ese era el límite fijado.
El helicóptero Nº 6 es abandonado mientras que se disponden a enfrentar la primer tormenta de arena
El jefe del elemento de helicópteros regresa y aterriza, mientras que el número 5 abandona la misión.
El primer helicóptero (El N° 3) salió de la tormenta de arena
a 56 km de Desierto Uno y usando al camión cisterna iraní incendiado como baliza aterrizó 50 minutos más tarde de lo previsto. Las siguientes aeronaves comenzaron a llegar dispersas en la
siguiente hora y media; todas provenientes de direcciones diferentes (excepto los N° 1 y 2 que llegaron juntos).
Aunque las tripulaciones estaban sacudidas por la experiencia, los helicópteros fueron rápidamente desplazados a sus reabastecedores C-130 iniciando la carga de combustible, y el elemento asalto comenzó a abordar en sus aeronaves designadas.
Los helicópteros restantes se disponen a reabastecerse
Pero finalmente los helicópteros había llegado y Beckwith quería continuar, él era consciente que los contratiempos siempre influyen en cualquier plan y áun estaban en condiciones de llegar a Teherán. Sólo había que apurarse en el reabastecimiento y partirían.