SE INCORPORA A LA BASE MARAMBIO EL HELICÓPTERO MI-171E, ADQUIRIDO A RUSIA, QUE PODRÁ OPERAR EN COMPLICADAS CONDICIONES METEOROLÓGICAS Y PODRA VOLAR POR LAS BASES ANTÁRTICAS
El jefe de la Base Antártica Marambio, comodoro Enrique Videla, anunció que se sumará a esa estación científica y técnica un helicóptero Mi-171E, adquirido a Rusia, que podrá operar en complicadas condiciones meteorológicas y se destinará a búsquedas y rescates, además de abastecer bases antárticas.
El jefe aeronáutico indicó que Marambio soporta hoy una temperatura de "40 grados bajo cero" y calificó a esa estación como "un reservorio de ciencias para el futuro".
Subrayó que se trabaja sobre la descripción de procesos físicos, biológicos, glaciológicos, oceanográficos que identifican cómo contribuyen al cambio ambiental y particularmente a la alteración del sistema clima-océano-hielo.
Videla indicó que la Antártida "un gran barómetro a nivel mundial" y añadió que "todo lo que hacemos en el continente repercute aquí".
Confirmó que la base funciona todo el año y que su aeródromo es cabecera de un puente aéreo entre el continente americano y antártico, a través de los aviones Hércules C-130, que convierte a Marambio en la puerta de entrada al continente blanco.
El comodoro subrayó que la base contribuye a "afirmar los derechos argentinos de soberanía, así como profundizar las actividades científicas y técnicas, tendientes a lograr un completo conocimiento de la naturaleza relacionadas con las prioridades del país, promoviendo la conservación y preservación de sus recursos y la protección del medio ambiente, la integración latinoamericana y la prestación de servicios".
Remarcó el compromiso de Argentina a la protección del medio ambiente antártico y los ecosistemas dependientes y asociados, considerando a la Antártida como "un ámbito consagrado a la Paz y a la Ciencia".
Videla sostuvo que Marambio es el punto de apoyo a través del cual se brinda a la comunidad Antártica el apoyo logístico operacional para el desarrollo de los programas científico-tecnológico, el traslado de personal y carga, así como búsqueda y salvamento y evacuaciones sanitarias.
La Dirección de Asuntos Antárticos de la Fuerza Aérea adquirió para la Base Marambio, como apoyo a las actividades científicas, logísticas y de protección del medio ambiente, la vida humana y los recursos en el territorio antártico, dando de esta manera, cumplimiento a la normativa legal internacional y nacional vigente y proporcionará una herramienta eficaz para fortalecer la Política Nacional Antártico.
Fue diseñado en la fábrica de helicópteros Mil de Moscú, fundada por Mikhail Mil, como un derivado del Mil Mi-8, uno de los modelos más populares en el mundo por su comparativo bajo costo y alta capacidad de carga útil. De gran éxito internacional, más de 3.000 aeronaves se encuentran operando en numerosas Fuerzas Armadas como Chile, Colombia, Ecuador, México, Perú, Venezuela, Nicaragua, Cuba y Brasil.
Las características principales del Mi-171E con 25,3 m de largo, alto 5,54 m, ancho 4,5 m, diámetro del rotor 21,3 m, volúmen de carga 23 m3, puede cargar 4.000 kg sea interno ó externo, peso máximo de despegue 13000 kg, capacidad de carga27 pasajeros ó 12 camillas, techo de servicio 6000 m, rango temperaturas de operación desde – 50º a + 50º C, límite de viento en despegue/aterrizaje (frente-derecha-izquierda-cola) 71 – 35 – 35 – 35 km/h, velocidad crucero con 13000 kg 215 km/h, autonomía (máxima capacidad de carga) 2:40 hs, con 2 tanques externos y 2000 kg de carga 4:45 hs y consumo promedio con carga máxima 750 kg/h (4,2 kg/km).
22 por ciento menos cruceros
Menos operadores de grandes barcos consideraron rentable navegar por la Antártida debido a la prohibición de emplear combustible pesado. La cifra de pasajeros descendió 22% en la temporada 2011-2012, quedando en 26.519 desde los 33.824 reportados en 2010-2011.
La prohibición de quemar combustible pesado por debajo de los 60 grados de latitud sur entró en vigor en agosto de 2011.
Precisamente ese fue el cuarto año consecutivo en que cayó el turismo en la zona, indican estadísticas de la Asociación Internacional de Touroperadores de la Antártida (International Association of Antárctica Tour Operators, IAATO).
La última temporada pico para el turismo en la Antártida ocurrió en 2007-2008, cuando se registraron 46.265 pasajeros.
La IAATO precisó que las cifras han caído especialmente en la categoría de sólo-crucero, que consiste en grandes barcos con más de 500 pasajeros que no desembarcan a los viajeros. Los 4.872 pasajeros de esta categoría en 2011-2012 contrastan con los 14.373 reportados en la temporada anterior y "muestran los efectos de la prohibición", señaló la entidad.
Las expediciones tradicionales en barcos de mediano porte y yates, con capacidad para menos de 500 pasajeros y con desembarcos incluidos en su oferta, totalizaron 20.271 viajeros, un aumento de 9,4%.
En tanto, las combinaciones vuelo-crucero y turismo terrestre, con 860 y 516 pasajeros respectivamente, representaron el 2% del total de viajeros transportados por los miembros de la IAATO.
Steve Wellmeir, director administrativo de la IAATO, dijo que el aumento de viajeros en expediciones de barcos medianos y yates, junto con quienes combinan viaje aéreo a la Antártida con cruceros en barcos pequeños, debe continuar en la próxima temporada.
También se espera un rebote de la categoría sólo-crucero, con un cierto número más de viajes que los cinco operados en el período 2011-2012. La IAATO proyecta que el total o la suma en las distintas modalidades ascienda a 35 mil en la próxima temporada, alcanzando niveles similares a los de dos o tres años atrás.