El gobierno venezolano donó en septiembre de 2007, una suma cercana a los 5,9 millones de dólares a las Fuerzas Armadas bolivianas. De acuerdo a informe del Ministerio de Defensa de Bolivia, los fondos se distribuyeron de la siguiente forma:
Ejército de Bolivia: 3,7 millones de dólares entregados a 85 unidades para ejecutar 193 proyectos. Cada unidad recibió entre 15 a 50 mil dólares.
Fuerza Naval Boliviana (FNB): 1,2 millones de dólares para mejorar 29 unidades y ejecutar 43 proyectos con sumas que oscilan entre los 31 mil a más de 57 mil dólares.
Fuerza Aérea Boliviana (FAB): 893.906 dólares para equipar y mejorar la infraestructura de 20 unidades militares y ejecutar 36 proyectos en montos que van desde los 38 mil a más de 50 mil dólares.
A estos 5,9 millones de dólares hay que sumar 200 mil dólares que entregó la Embajada de Venezuela en La Paz, como adelanto, de 400 mil dólares solicitados por el presidente Evo Morales y que se requieren para terminar una embarcación para la Escuela Naval Militar. El buque lo está construyendo un astillero en el lago Titicaca. La información la suministró el propio mandatario boliviano.
Por otra parte, el gobierno de Venezuela comprometió una donación de 179 vehículos y otros equipos para la Policía Nacional de Bolivia, por un monto de cuatro millones de dólares. A tal efecto, también en el mes de septiembre, se hizo entrega de los primeros 55 vehículos, entre que se contabilizaron: 16 automóviles Nissan, 9 Toyota, además, de dos ambulancias, dos autobuses, diecisiete camionetas Toyota, y, nueve motocicletas Suzuki. El resto de los vehículos y equipos será entregado antes de que finalice 2007.
Es importante señalar, que las donaciones venezolanas a las Fuerzas Armadas boliviana, se fundamentan en el Acuerdo de Seguridad y Defensa suscrito el 26 de mayo de 2006 por los presidentes de Bolivia y Venezuela.
Con base en ese convenio, el 17 de agosto del mismo año los ministros de Defensa de ambos países suscribieron un acuerdo de cooperación para el intercambio de visiones y posturas estratégicas de Defensa, a raíz del cual, Venezuela se comprometió, entre otras cosas, a financiar una serie de obras de infraestructura militar en las regiones fronterizas bolivianas y a equipar a batallones de Ingenieros del Ejército de ese país. El costo de tales obras, se estima, en más de 50 millones de dólares.
Como consecuencia del acuerdo de mayo de 2006, en junio siguiente la Fuerza Aérea Venezolana (FAV) cedió, en calidad de préstamo por tiempo indefinido, a la Fuerza Aérea Boliviana (FAB) dos helicópteros Eurocopter AS.352AC Cougar. Las aeronaves, que aún permanecen en Bolivia, lucen los colores y matrículas (FAB-750 y FAB-751) de la FAB. El par de Cougar, adquiridos por la FAV en 1998, para el momento de su cesión se encontraban operativos y fueron retirados de la línea de vuelo del Grupo Aéreo de Operaciones Especiales Nº 10, para ponerlos a disposición del presidente de la República de Bolivia.
Posteriormente, en marzo de 2007, fueron donados a la FAB dos helicópteros Aerospatiale SA-316B Alouette III que corresponden a un lote de 20 unidades adquiridas en 1967, que fueron retiradas del servicio por la FAV hace unos cinco años y se encontraban almacenadas. El pasado 28 de junio, uno de los helicópteros se accidentó en Cochabamba, específicamente el matriculado FAB-746, c/n 1432 (ex FAV-2287), con saldo de tres militares bolivianos y un suboficial de la Fuerza Aérea Venezolana, fallecidos.
Dentro del paquete de ayuda militar venezolana a Bolivia, no se contabiliza otro tipo de cooperación prestada por las fuerzas armadas de Venezuela.
Es el caso, por ejemplo, de los frecuentes vuelos de aviones de la Fuerza Aérea Venezolana a Bolivia, transportando personal, equipos y materiales de ayuda humanitaria y de otra índole. También, con mismo cometido, el de buques de transporte de la Armada de Venezuela que recalan en el puerto chileno de Arica.
El despliegue, en territorio boliviano, de personal y aeronaves militares venezolanas, para misiones de socorro ante desastres naturales. Es el caso, del envío en marzo pasado, de dos helicópteros Mi-17V-5, de la Aviación del Ejército, y, un M-172 del Servicio de Búsqueda y Salvamento (SAR)del Instituto Nacional de Aviación Civil (Inac) operado por personal militar.
Igualmente, la donación de varias decenas de millones de dólares en maquinaria pesada y equipos de construcción, nuevos, destinados a labores de reconstrucción en las zonas afectadas por las inundaciones al norte de Bolivia. Si bien esa maquinaria es de naturaleza civil está siendo operada por el Comando de Ingeniería del Ejército de Bolivia con el apoyo de efectivos del VI Cuerpo de Ingenieros del Ejército de Venezuela, para lo cual se conformóla Fuerza Binacional de Ingenieros Militares Mariscal Antonio José de Sucre.
Finalmente, el uso frecuente que hace el presidente de la República de Bolivia de aviones de la Fuerza Aérea Venezolana para sus desplazamientos internacionales, particularmente, del Airbus A-319C (FAV-0001) y del Boeing 737-200 (FAV-0207).