Rusia entra al mercado de cazas de última generación
Moscú. — Rusia realizó el vuelo de prueba de un largamente esperado avión de combate, determinado a desafiar a Estados Unidos en el terreno de la superioridad tecnológica en el cielo e impresionar a los potenciales compradores de armas.
El caza de “quinta generación” —el primer avión de guerra completamente nuevo de Rusia desde que el colapso de la Unión Soviética llevó a la industria de defensa a la pobreza y la desorganización— voló este viernes durante 47 minutos, según informó el fabricante de aviones Sukhoi. “El avión se desempeñó bien. Todas nuestras expectativas para el primer vuelo se cumplieron”, dijo la portavoz de Sukhoi, Olga Kayukova, al canal de televisión Rossiya 24. “El debut fue un éxito”, agregó.
Las principales cadenas de televisión rusas iniciaron sus programas de noticias con reportes sobre el vuelo y mostraron imágenes del avión despegando desde una pista en la fábrica de Sukhoi en Komsomolsk-on-Amur, en el lejano este ruso. Los periodistas extranjeros no fueron invitados al evento.
Los aviones de quinta generación son, se supone, invisibles a los radares, tienen avanzados sistemas de control de vuelo y de armas y pueden volar a velocidades supersónicas constantes. El nuevo avión es la respuesta de Moscú a la aeronave de caza estadounidense F-22 Raptor, la única de quinta generación actualmente en servicio del mundo, que voló por primera vez en 1997.
Según analistas de defensa, probablemente pasarán de cinco a siete años antes de que la fuerza aérea rusa pueda volar el nuevo avión. Un desarrollo exitoso de la aeronave es crucial para que Rusia demuestre que puede desafiar a la tecnología estadounidense de igual a igual. Entre tanto, el Su-50 que voló ayer deberá demostrarle al exigente mundo de la defensa que es todo lo que sus propietarios dicen que es: invisible al radar y dotado de la versatilidad inigualable en los virajes del F-22 estadounidense, así como de un sistema de control de armas que le permita al piloto optar en segundos por el misil o bomba más apta para la amenaza que enfrenta.
Por lo demás, no se trata solamente de vencer comercialmente al muy costoto F-22 Raptor: los estadounidenses han puesto además en el mercado a su versión monomotor y más barata, el J-35, y los europeos compiten con su caza Eurofighter Typhoon. Y aún falta sumar al caza naval francés Rafale. Por ahora se desconoce el precio al que se ofrecerá el Su-50. l
Fuente: Diario La Capital Rosario 31/02/10