Justamente de ese blog de Federico Supervielle es que saqué esa interpretación. Pero puede ser que haya interpretado de manera errónea
Si los barcos están en desventaja frente a los submarinos, ¿cómo nos enfrentamos a ellos?
www.fsupervielle.com
cito, sacando de contexto quizás, de dónde yo me baso para mi interpretación
Generalizando, un buque de superficie está en desventaja respecto a un submarino….A pesar de que los barcos de superficie tengan ciertas ventajas, es indiscutible que, en un uno contra uno, por lo general, el submarino tiene las de ganar….los submarinos no son más que blancos para las aeronaves.
Sin una inteligencia muy precisa, en aguas abiertas, es casi imposible encontrar un submarino. Esto nos da dos opciones: defender aquello que queramos defender, que normalmente serán nuestras unidades de superficie más valiosas o, también, determinadas zonas de costa; o emboscar al submarino en una zona por la que tenga que pasar obligatoriamente.
La última capa de defensa puramente antisubmarina la solían ocupar dos o tres fragatas tipo 21, a una distancia de unas siete millas del grueso. Estas distancias se calculan en función de muchos datos, que incluyen la velocidad del submarino, su alcance de torpedos, el punto en el que se estima que pinchará con el peri para obtener los últimos datos antes de lanzar y el alcance sonar estimado de los escoltas. Hay que tener en cuenta que, aunque no la mencionamos en el apartado anterior, la táctica usada por el submarino que quiera penetrar una cortina ASW será, generalmente, intentar meterse para abajo mientras los escoltas le pasan por encima y subir a cota periscópica ya dentro del redil para echar un vistazo a la oveja que se quiere comer (la más gorda, claro). Las fragatas tipo 21 tenían sus helicópteros en alerta (si no en el aire) para lo que pudiera ocurrir, pero aún más lejos, entre 12 y 20 millas del grueso, los Sea King y sus sonares calables, volando desde los portaviones, sonorizaban sectores de unos 40º.
que cada portaviones tenía que mantener una pareja de helicópteros calando, lo que implicaba tener un tercero yendo o volviendo a relevarlos o, al menos, pasando la prevuelo en cubierta. Mantener este esfuerzo 24 horas al día, durante semanas, teniendo en cuenta que un cuarto aparato tenía que estar listo por si alguno tenía una avería, nos da una idea de lo que implicaba ofrecer una buena protección ASW a la fuerza. También da que pensar: tener un helicóptero embarcado en un escolta es un excelente medio de detección y ataque; el helicóptero es el mejor amigo del barco. Pero sin un portahelicópteros que sea capaz de mantener dos o tres aparatos en el aire de forma indefinida, para lo que necesitará cerca de una docena a bordo, es difícil asegurar una buena defensa antisubmarina
Es correcta la cita. Lo más importante de la clase de portaaviones Invencible era, justamente, sus 15 helicópteros antisubmarinos. Era la razón por la que nacieron esos buques y la mayoría de los portaaviones ligeros. Es la doctrina detrás de los portaaviones ligeros actuales, donde la flota de helicópteros antisubmarinos es más importante que la de aviones V/STOL.
Pero al mismo tiempo es incompleta. Porque una cosa es un submarino vs. un buque y otra cosa es una flota coordinada de cuatro u ocho buques realizando rastrillaje antisubmarino.
También la tecnología ha estado evolucionando. A diferencia de la guerra de Malvinas, lo esperable de los buques antisubmarinos modernos son sus largos sonares remolcados. Un tipo de sonar que cambia el juego.
Los submarinos tampoco se quedan atrás, con sus propios sonares remolcados y torpedos de larga distancia. De hecho, en la armada estadounidense se cuenta a los submarinos de ataque como uno de los principales sistema de defensa antisubmarina de la flota de portaaviones. Un portaaviones no sólo es escoltado por una escuadra de entre 4 y 6 destructores y una decena de helicópteros antisubmarinos, sino que también cuenta con uno o dos submarinos de ataques que también participan del rastrillaje antisubmarino.
Ahora bien, también es correcto lo que comenta
@Ciclista2. En realidad los helicópteros no están todo el tiempo en el aire y sin una misión clara. Lo que está todo el tiempo trabajando es la escuadrilla de buques con sus sonares, preferiblemente remolcados. Luego se van enviando los helicópteros hacía los punto de interés. Los helicópteros pueden mantenerse relativamente poco tiempo en el aire, así que hay que ser selectivos en su uso. Incluso aunque se trate de los AW-101.
A mi me resulta interesante la doctrina japonesa 8-8 y las mil millas y es la que utilizó como punto de partida típico de mis exposiciones.
Es una doctrina fuertemente antisubmarina, probablemente una de las más avanzadas del mundo en esta materia.
En las décadas de 1960 y 1970 realizaron varios estudios sobre cuál era la "configuración óptima" para la defensa antisubmarina eficaz. Sus investigaciones llegaron a la conclusión que la configuración optima es la que popularmente se conoce como 8-8. Ocho buques antisubmarinos y Ocho helicópteros antisubmarinos.
Los ocho buques antisubmarinos deben poder dividirse en dos sub-escuadras de 4 buques antisubmarinos cada una. Las dos sub-escuadras trabajan coordinadamente en sus operaciones de rastrillaje.
Además, los ocho helicópteros prometen tener cuanto menos uno en el aire en cualquier momento, aunque la forma de trabajo normal es como la describe
@Ciclista2.
Además, uno de los ocho buques tiene que tener un taller de reparación y mantenimiento de helicópteros para maximizar la tasa de disponibilidad de la flota de helicópteros, dando nacimiento al "destructor portahelicópteros". Generalmente, el mismo buque taller también tiene el centro de mando de la flota de ocho buques.
Además, 8-8 se queda incompleto. En realidad debiera ser conocida como 8-8-4. Por cada 8 buques antisubmarinos conforman una flota de 4 submarinos antisubmarinos. Los ocho buques, los ocho helicópteros y los cuatro submarinos coordinan su trabajo de patrullaje para maximizar la capacidad de guerra antisubmarina.
El único cambio relevante en la última década es que han decidido que el "destructor antisubmarino" crezca en tamaño inspirándose en la experiencia europea (Invencible, Principe de Asturia, Garivaldi, Cavour, etc.) con objeto de maximizar la tasa de disponibilidad de los 8 helicópteros antisubmarinos. En el proceso se transforman en buques capitales que necesitan ser escoltados. Por tanto, pienso que el 8-8 debiera comenzar a llamarse 1-8-8-4: un portaaviones ligero antisubmarino, 4 escoltas antisubmarinos, 8 helicópteros antisubmarinos y 4 submarinos antisubmarinos.
De esta forma, la doctrina japonesa nos habla de lo complejo que es la lucha antisubmarina y la necesidades de abordar esta amenaza con múltiples medios coordinadamente. No se trata de "buques vs. helicópteros" como parece ser el debate del foro, sino de "buque Y helicópteros Y....".
También es interesante que no se necesitan enormes cantidad de buques y helicópteros para alcanzar una "configuración óptima". Sólo se necesitan 8 helicópteros. Sólo se necesitan 8 buques. Sólo se necesitan 4 submarinos. Y, si sobra el dinero, sólo se necesita un portaaviones ligero.
Ahora bien, si damos credibilidad a estos estudios, también nos dice todo lo que es sub-óptimo a la hora de prepararse para una eficaz defensa antisubmarina.
Japón además conformó cuatro de estas flotas 8-8 (o, mejor dicho, 1-8-8-4) para garantizarse tener todo el tiempo una de las mismas listas para el combate, en un amplio programa de rotación y formación permanente entre las cuatro flotas y sus tripulaciones. Pero para la mayor parte del resto del mundo eso es una utopía.