Otro poquito.
Testimonio del General de Brigada (R) D Héctor Lubin Arias
Ex - Jefe del Grupo de Artillería de Defensa Aérea 601
El 2 de abril de 1982, el Gobierno argentino decidió recuperar con el empleo de las fuerzas militares, las Islas Malvinas, Sandwich y Georgias del Sur, archipiélago cuya soberanía reivindica desde el siglo pasado.
La intención era sin duda, a partir del hecho consumado, obtener la devolución del patrimonio reivindicado a través de negociaciones diplomáticas contando con cierto apoyo internacional.
La rápida y enérgica reacción del Reino Unido de Gran Bretaña sumada al fracaso de las negociaciones para evitar un enfrentamiento armado, llevaron a la Guerra de Malvinas. La relación en el poder de combate, condujo a una inexorable derrota de las fuerzas que defendían las Islas.
La confirmación de un cerco estratégico operacional que se inició con la zona de exclusión (bloqueo submarino), conformado por Gran Bretaña el 12 de abril y que culminó con un cerco táctico alrededor de Puerto Argentino el 14 de junio, decidió el resultado de la batalla.
Las fuerzas terrestres argentinas que fueron empeñadas en la defensa, debieron combatir aisladas, sin superioridad aérea, sin movilidad y con serios problemas logísticos.
Sin embargo la lucha se inició el 1ro de mayo a la madrugada, duró un mes y medio, a pesar de la abrumadora superioridad británica.
En esa resistencia, más allá de lo razonable, mucho tuvo que ver la artillería antiaérea argentina como explicaremos a continuación:
1. La Task Force, como se llamó a la fuerza de tareas británicas, llegó al Atlántico Sur con sus primeros elementos alrededor del 20 de abril y luego durante la campaña fue permanentemente reforzada, llegando a tener en los primeros días de junio los siguientes medios:
2 Portaaviones
6 Submarinos
36 Buques de Guerra
25 Buques Auxiliares
45 Buques logísticos y de transporte de tropas
36 Aviones Harrier
110 Helicópteros
Fuerza de desembarco: 2 Cdos Br y formaciones - 7 Unidades de nivel batallón
2. La Flota británica siempre protegida por una impresionante cobertura antiaérea, logró en los primeros días de mayo un dominio casi absoluto de las aguas alrededor de las Malvinas, sin necesidad de desgastarse librando una batalla naval.
3. La Fuerza Aérea Argentina equipada con poderosos aviones de combate como los Mirage, los Daguer y los Skyhawk, al no haberse podido prolongar la pista de aterrizaje en la Isla Soledad, debían operar desde sus bases en el continente, al igual que la Aviación Naval con sus Super Etendart y sus A4C. Aún con reabastecimiento en vuelo, la autonomía de los aviones argentinos no era suficiente para sobrevolar las Islas y combatir contra los Harriers y mucho menos poder llegar al corazón de la flota británica, situada bien al Este del Archipiélago.
En consecuencia, a partir del 1ro de mayo, los Sea Harrier dominaban sin interferencias el espacio aéreo de Malvinas por encima de los 6000 mts.
4. La situación descripta imponía también al Sistema de Defensa Aérea argentino una severa limitación: la de no disponer de caza interceptora, primer escalón esencial en este tipo de sistemas. La Defensa Aérea argentina quedaba reducida entonces, sólo a sus cañones y misiles antiaéreos de baja altura (hasta 6.000 mts), de los cuales los únicos en aptitud de operar las 24 hs y en cualquier condición meteorológica eran los Cañones de 35 mm Oerlikon y la Unidad de Fuego Roland.
5. Otra importante limitación del Sistema de DA argentino fue la falta de movilidad de sus medios más modernos y eficaces, los que al enterrar su parte inferior en la turba, sólo podían ser movidos para cambiarlos de posición con el auxilio de un helicóptero tipo Chinook, de los cuales solamente había 2/3 disponibles en toda la Defensa para una gran cantidad de misiones. Ello incrementó la vulnerabilidad de las armas antiaéreas y dejó sectores de la posición sin protección, por ejemplo las posiciones de los Regimientos de Infantería situados al O de la localidad, Unidades que carecían también de misiles portátiles del tipo Blow Pipe O Stinger.
6. Al iniciarse las hostilidades el sábado 1ro de mayo con el ataque aéreo a la pista de aterrizaje, a la Fuerza de Tareas británica se le presentaba un panorama muy favorable. Si se inutilizaba la pista donde podían aterrizar los aviones Hércules C - 130, se cortaba el único cordón umbilical que unía las Islas con el continente y en consecuencia el bloqueo sería total. Aún fracasando en ese objetivo, los Sea Harriers serían en los días subsiguientes, una poderosa armada junto con los cañones de los buques de guerra, para desgastar y debilitar rápidamente a la Defensa, destruyendo sus medios más importantes (artillería, aviones Pucará, helicópteros, embarcaciones, puestos de comando e instalaciones logísticas). En esas condiciones, los argentinos tendrían que capitular quizás sin necesidad de recurrir a acciones terrestres.
7. Sin embargo, en ese primer día de combate, los medios aéreos británicos no sólo no pudieron dejar inoperable la pista de Puerto Argentino, sino que además recibieron un fuego antiaéreo de tal magnitud y eficacia que ponía en serio peligro la supervivencia de los Harriers, principal arma de defensa aérea de su flota. Ello se ratificó cuatro días después con el derribo de uno de los Harriers que atacaron por segunda vez el aeródromo de campaña de Darwin.
8. A partir de esas primeras acciones, el hostigamiento a la Defensa se basó casi exclusivamente en los cañoneos nocturnos de fragatas y destructores británicos sobre las posiciones argentinas, mientras los Harriers patrullaban a gran altura las Islas, fuera del alcance de cañones y misiles en función de reconocimiento y defensa aérea. Excepcionalmente entraban en el alcance de las armas antiaéreas argentinas y cuando se atrevieron a hacerlo sufrieron sensibles pérdidas.
9. Puede surgir naturalmente la pregunta acerca de los factores que motivaban tal eficiencia antiaérea en un contexto de notorio desequilibrio estratégico táctico y técnico de las fuerzas que se entrenaban.
Un primer factor a considerar es la gran calidad del material antiaéreo de baja altura "todo tiempo" que poseía como dotación el GADA 601 y de los radares de largo alcance de la FAA y del EA.
Estos dos radares operando en forma complementaria y turnándose casi siempre, fueron un valiosísimo medio de "alerta temprana" para toda la defensa. Fueron los únicos "ojos" de la defensa.
La calidad de los materiales no hubiera sido suficiente si no se hubiera organizado, como se hizo, un Sistema Conjunto de Defensa Aérea (CIC-PCDA-Unidades de fuego), con los medios disponibles en la Isla de las tres Fuerzas. Es el segundo factor.
Por último, un tercer factor, fue la excelente capacitación de los jefes de sección, jefes de pieza y operadores de directores de tiro y de radar de todas las unidades de fuego, lograda a través de cursos y ejercitaciones desarrolladas los años anteriores al conflicto.
10. La artillería antiaérea argentina obtuvo durante la campaña, el derribo cierto (no se cuentan los no comprobados) de nueve aviones Harriers y como consecuencia de su acción disuasiva, logró mantener la pista de aterrizaje de Puerto Argentino operable hasta el último día de combate . Además de demostrar eficiencia en el fuego antiaéreo, fue empleada en tres momentos cruciales de la batalla en misiones de fuego terrestre contra infantería enemiga; el 28 de mayo en Pradera de Ganso (3/B/601, el 14 de junio en la Península de Camber contra "fuerzas especiales" británicas (B/101) y el mismo día sobre las alturas de Wirless Ridge (1/B/601) ocupadas por un batallón de paracaidistas británico.
11. Cuando se produce la capitulación, a mediodía del 14 de junio la situación del GADA 601(+) era la siguiente:
Personal
Muertos: 1 oficial, 2 suboficiales y 6 soldados
Heridos: 1 oficial, 6 suboficiales y 25 soldados
Prisioneros: 33 hombres de la 3/B/601 en Pradera del Ganso
Material
1 director de tiro Skyguard de la 1/A/601 destruido por un misil antiradar el 03 de junio
2 cañones de 35 mm y 1 director de tiro de la 3/B/601inutilizados el 03 Jun
1 radar de vigilancia Alert fuera de servicio por cañoneo naval el 13/14 Jun
Munición
Suficiente para seguir cumpliendo la misión.
Combustible
Insuficiente para hacer funcionar todos los grupos electrógenos.
Despliegue
Todas las secciones mantenían su posición excepto la 1/B/601 y la B/101 que recibieron la orden de repliegue sobre Puerto Argentino el 14 de junio a las 09:00 hs.
Ultima orden recibida
Proteger el repliegue del BIM5, Unidad que era sobrevolada por helicópteros enemigos durante su movimiento hacia la localidad.