Los logros y desafíos de Evo, a un año de asumir la presidencia y ante una Bolivia convulsionada
Enfrentado con los gobernadores de La Paz y Cochabamba, Morales cumple mañana su primer año de gestión. Nacionalizó el gas y el petróleo y logró un superavit fiscal. La Asamblea Constituyente aún no logra sesionar.
Por Jorge Lewinger (de Télam)
La Paz, Bolivia - El presidente de Bolivia, Evo Morales, cumple mañana un año de gestión en medio de un duro enfrentamiento de sus partidarios con los gobernadores opositores de La Paz y Cochabamba, voceros de un conflicto mayor con el poder político y económico del rico oriente del país.
El aymará Morales, que asumió la presidencia el 22 de enero de 2006 sin resignar la titularidad de la Federación de Campesinos del Trópico (cocaleros) de Cochabamba, lo que es un dato simbólico no menor, obtuvo en un año importantes logros con la presión de los movimientos sociales y su mayoría en el Legislativo.
En primer lugar el mandatario obtuvo la nacionalización del gas y el petróleo sin que ninguna empresa trasnacional se retirara del país, pero con un fuerte encontronazo con Brasil, con el que aún negocia una suba del precio del gas, y su compañía Petrobras, la principal empresa inversora en Bolivia.
"Por más que (el presidente de Brasil, Luiz Inácio) Lula (Da Silva) nos hable de solidaridad, lo que queremos es un precio justo" (para nuestro gas), disparó Morales al hablar el viernes en la cumbre del Mercosur de Rio de Janeiro, informó la agencia ANSA.
También la secretaria de Estado de los Estados Unidos, Condoleezza Rice, cuestionó esa nacionalización, a la que calificó de una política "desafortunada".
El presidente boliviano también pudo aumentar en algo los sueldos mínimos; dio un reducido pero masivo subsidio a estudiantes y logró, por primera vez en décadas, pasar del déficit al superávit fiscal.
El aumento de la participación estatal en la renta petrolera, que supone la nacionalización, y la suba del precio del gas que vende a la Argentina -sigue negociando un aumento similar con Brasil- explican tanto esa incipiente mejor distribución de los ingresos como la salud de las cuentas fiscales bolivianas.
Morales también pudo aprobar con fuertes resistencia de la "media luna" (las provincias petroleras y agroganaderas de Tarija, Santa Cruz, Beni y Pando) una amplia ley de reforma agraria.
Según señaló a Télam el senador del gobernante Movimiento al Socialismo (MAS), Antonio Peredo, en su visita a Buenos Aires en el 2006, esa "revolución agraria", como la definió, es indispensable "para que haya un mercado interno en Bolivia" y el país deje de ser sólo un "exportador de materias primas y bolivianos".
En cambio, sigue empantanada desde hace seis meses la Asamblea Constituyente con la que el primer presidente indígena de Bolivia planteó "refundar" el país.
Con una holgada mayoría (alrededor de 142 constituyentes, con algunos aliados menores, sobre un total de 255), pero sin los dos tercios que exige la ley de Convocatoria de esa asamblea para reformar la Constitución, hasta ahora no pudo comenzar a funcionar por el fuerte bloqueo de las minoritarias fuerzas opositoras.
Morales insiste en que la Constituyente es "originaria" y está por encima de todos los poderes constituidos, pero hasta ahora la alianza de los movimientos cívicos y los prefectos (gobernadores) del oriente con los conservadores partidos de oposición, fundamentalmente Poder Democrático y Social (Podemos) y Unidad Nacional (UN) rechazaron con éxito esa tesitura.
La lucha por la autonomía que reclama la "media luna", con connotaciones secesionistas, expresadas especialmente por el gobierno y los cívicos cruceños, tuvo un vocero inesperado cuando el prefecto (gobernador) de Cochabamba, Manfred Reyes Villa, defendió la vocación "independentista" del oriente y planteó un nuevo referendo autonómico en su provincia.
En Cochabamba -igual que a nivel nacional- el referendo autonómico de julio pasado obtuvo unafuerte mayoría por el NO a las autonomías, por lo que la iniciativa del ex capitán Reyes Villa sonó a desafío a los movimientos sociales de su región, principal bastión de Morales.
De este modo, el nuevo referendo propuesto por Reyes Villa, generó desde hace dos semanas una fuerte confrontación social entre campesinos, trabajadores y sectores juveniles de clases medias afines al gobernador, que dejó un saldo de dos muertos y más de 100 heridos.
Finalmente el prefecto, que debió refugiarse en Santa Cruz, y recién retornó el jueves pasado, pero sin reasumir sus funciones, dio marcha atrás con el plebiscito, lo que no consiguió apagar el encono de las organizaciones sociales que ya no lo reconocen como autoridad
Pese a que el gobierno de Morales mantuvo el reconocimiento legal de Reyes Villa, pero sin desautorizar a los movimientos sociales, el conflicto se extendió a La Paz, donde también es cuestionado el gobernador José Luis Paredes, que se solidarizó con el mandatario de Cochabamba y los reclamos de la "media luna".
Mientras tanto, Morales festeja, en su política exterior, haber creado un clima de confianza con Chile para discutir su salida al Pacífico; su alineamiento con Venezuela, Cuba y ahora Ecuador; y su bien recibida propuesta de ser miembro pleno del Mercosur, sino abandonar la Comunidad Andina de Naciones.