Aja. Un clase Colossus con media docena de aviones quebrados con bombas tontas frente a una flota con dos portas, destructores misilisticos, subs atomicos y convencionales, y toda la infraestructura satelital OTAN a disposicion.
Por suerte alguien en la Armada valoraba un poco a sus camaradas, sino capaz que los mandaban igual.
En el conflicto por las Malvinas (conflicto insular) el dominio del agua lo es todo. O hablando más técnicamente, podemos decir que es la condición de victoria. El que domina el agua podrá decidir cuando atacar, cuando asediar, cuando esperar, cuando moverse y cuando parar.
La amenaza argentina eran sus aviones (porque la flota quedó fuera de escenario). Con los aviones argentina busco disminuir capacidades Navales y en parte negar el mar. Entonces, los ingleses dependían de sus portaaviones para que sus cazas embarcados puedan luchar por el dominio del aire, y así asegurar el dominio del mar. Pero siempre el objetivo es dominar el mar. No hay que perder la perspectiva en esta situación.
Argentina podía poner en jaque el dominio naval si hundía al menos un portaaviones, o dañaba un número considerable de escoltas. Inglaterra se hubiera visto obligada a replegarse a lamer heridas. Pero si Argentina no iba a tomar el control del agua (con su propia flota) los ingleses siempre podían replegarse, reagruparse, recibir refuerzos y volver a la situacion de control total sin ningún impedimento, y volver a realizar un bloqueo a las islas, asedio, etc, etc.
La decisión de no luchar por el agua puedo entenderla, comprendo los racionales de la decision, lo que no comparto es la decisión de continuar la guerra exponiendo máquinas y hombres cuando se entregó al ENO la condición de victoria (dominio del agua).
Nuestros cráneos pensaron que con los aviones podíamos obligar a los ingleses a volverse a inglaterra, a renunciar a su objetivo. Ingenuos.. aún hundiéndoles media flota, los ingleses iban a conseguir más y mejores buques y aviones, e iban a volver. 600 años de historia naval así los forjaron, piratas, buenos guerreros del agua. Sabían perfectamente las capacidades de argentina. Sabían que podíamos aceptar una batalla, y aún ganarla. Pero ellos sabían que JAMÁS íbamos a ganar la guerra. Ese olfato de pirata no se pierde tan fácil... Un buen pirata sabe cuál presa puede defenderse, y cuál no.
Saludos