Londres convoca al embajador español por los retrasos en Gibraltar
Colas para salir de Gibraltar el pasado 27 de julio. | Francisco Ledesma
Se tensa la situación diplomática por Gibraltar. El Ministerio británico de Exteriores convocó al embajador español en el Reino Unido para protestar por los controles policiales que España realiza en la frontera y que estos días han provocado retrasos de varias horas para salir del Peñón. Londres pide garantías para que no se repitan estos días.
Como el embajador Federico Trillo está de vacaciones, en su lugar acudió a la cita su encargado de negocios, Ramón Gandarias, quien ha transmitido que los controles son "irrenunciables" en una reunión con el diplomático británico Simon Gass. Le ha recordado que Gibraltar no forma parte del espacio Schengen y, por tanto, no es un territorio comunitario en el que haya libre circulación de mercancías ni régimen común del IVA.
"La alteración en el flujo fronterizo tiene un impacto directo en la prosperidad y bienestar de las comunidades en ambos lados de la frontera", declaró Swire. En el comunicado, no se ha hecho mención alguna a la colocación de unos bloques de hormigón "con pinchos de hierro" en aguas en disputa y que España reconoce como propias donde lanzan sus redes los pescadores españoles. El Gobierno ya denunció el caso ante la Fiscalía de Medio Ambiente porque había afectado a "la totalidad de las modalidades y especies" habituales en la Bahía de Algeciras" dejando el caladero "inutilizado".
El pasado día 29, el ministro británico de Asuntos Exteriores, William Hague, llamó a su homólogo español, José Manuel García-Margallo, para manifestarle la preocupación de su Gobierno por los retrasos. Entonces Londres no quiso "especular" con una relación entre la colocación del hormigón y los retrasos.
Paralelamente al convocatoria del embajador español, hoy han vuelto los controles tras unos días de relativa calma. Para salir de Gibraltar ha habido colas de entre cuatro y cinco horas.
Ante la queja formal de Gibraltar ante Bruselas, García-Margallo, recordaba ayer mismo que España está "cumpliendo estrictamente la legislación" con los controles en la verja, al contrario de lo que ocurre con las autoridades del Peñón, que están "violando" la ley con el lanzamiento de bloques de hormigón al fondo del mar.
El ministro de Exteriores insistió en que España "tiene que hacer cumplir la legislación de control aduanero para evitar el contrabando, los tráficos ilícitos y el blanqueo de dinero" y, por eso, explicó que los controles en la frontera del pasado fin de semana no responden a otra cosa que al "cumplimiento estricto de la legislación europea.
el mundo.es
Colas para salir de Gibraltar el pasado 27 de julio. | Francisco Ledesma
- Critica los 'controles desproporcionados' y los retrasos 'inaceptables'
- España recuerda su legalidad y subraya que son 'irrenunciables'
- El Peñón arrojó al mar hormigón con pinchos donde faenan los pescadores
Se tensa la situación diplomática por Gibraltar. El Ministerio británico de Exteriores convocó al embajador español en el Reino Unido para protestar por los controles policiales que España realiza en la frontera y que estos días han provocado retrasos de varias horas para salir del Peñón. Londres pide garantías para que no se repitan estos días.
Como el embajador Federico Trillo está de vacaciones, en su lugar acudió a la cita su encargado de negocios, Ramón Gandarias, quien ha transmitido que los controles son "irrenunciables" en una reunión con el diplomático británico Simon Gass. Le ha recordado que Gibraltar no forma parte del espacio Schengen y, por tanto, no es un territorio comunitario en el que haya libre circulación de mercancías ni régimen común del IVA.
Colas de unas cuatro horas se repiten este viernes
En un comunicado, el secretario de Estado de Exteriores, Hugo Swire, mostró su "preocupación" y arremetió contra los controles policiales tachándolos de "desproporcionados". En concreto, alude a los días del 26 al 28 y el 30 de julio, donde sostiene que hubo retrasos de "hasta siete horas". "Los retrasos son injustificados, inaceptables y no tienen cabida en una frontera entre socios de la Unión Europea", señala."La alteración en el flujo fronterizo tiene un impacto directo en la prosperidad y bienestar de las comunidades en ambos lados de la frontera", declaró Swire. En el comunicado, no se ha hecho mención alguna a la colocación de unos bloques de hormigón "con pinchos de hierro" en aguas en disputa y que España reconoce como propias donde lanzan sus redes los pescadores españoles. El Gobierno ya denunció el caso ante la Fiscalía de Medio Ambiente porque había afectado a "la totalidad de las modalidades y especies" habituales en la Bahía de Algeciras" dejando el caladero "inutilizado".
España denuncia que el caladero de la bahía ha quedado inutilizado por los bloques de hormigón
En la reunión, el representante español indicó que no se trata de contramedidas, han insistido fuentes diplomáticas, que recuerdan que tampoco violan el principio de no discriminación ni la libre circulación, porque se aplican a "todo aquel que pase por la frontera", y guardan "proporcionalidad" con el fin que buscan de "evitar tráficos ilícitos". ,El pasado día 29, el ministro británico de Asuntos Exteriores, William Hague, llamó a su homólogo español, José Manuel García-Margallo, para manifestarle la preocupación de su Gobierno por los retrasos. Entonces Londres no quiso "especular" con una relación entre la colocación del hormigón y los retrasos.
Paralelamente al convocatoria del embajador español, hoy han vuelto los controles tras unos días de relativa calma. Para salir de Gibraltar ha habido colas de entre cuatro y cinco horas.
Ante la queja formal de Gibraltar ante Bruselas, García-Margallo, recordaba ayer mismo que España está "cumpliendo estrictamente la legislación" con los controles en la verja, al contrario de lo que ocurre con las autoridades del Peñón, que están "violando" la ley con el lanzamiento de bloques de hormigón al fondo del mar.
El ministro de Exteriores insistió en que España "tiene que hacer cumplir la legislación de control aduanero para evitar el contrabando, los tráficos ilícitos y el blanqueo de dinero" y, por eso, explicó que los controles en la frontera del pasado fin de semana no responden a otra cosa que al "cumplimiento estricto de la legislación europea.
el mundo.es