Satélite Geoestacionario de Defensa y Comunicaciones Estratégicas 1 (SGDC-1)
Por TC Luciene da Silva Demenicis
En los últimos años, con la privatización de Embratel, los satélites brasileños que operaban en la banda X pasaron a ser controlados por Embratel Star One. Desde entonces, el país dejó de tener un satélite geoestacionario de comunicaciones genuinamente nacional y pasó a tener que pagar a extranjeros por el alquiler de los servicios en la banda X, de uso exclusivo militar en Brasil.
Con el objetivo de recuperar la autonomía y soberanía en el área de comunicaciones por satélite, perdida desde la privatización de Embratel, en julio de 1998, la Visiona Tecnología Espacial SA fue creada en 2012, como una asociación pública privada, siendo el
51% de EMBRAER y el 49% TELEBRAS, con el objetivo de actuar como integradora del proyecto del gobierno brasileño, el Satélite Geoestacionario de Defensa y Comunicaciones Estratégicas (SGDC) 1. El proyecto del SGDC fue instituido por el Decreto nº 7.769, de 28 de junio de 2012.
El primer satélite del proyecto, el SGDC-1, fue construido por la empresa Thales Alenia Space, en Cannes, sur de Francia, que fue la compañía ganadora de una selección internacional de proveedores organizada por Visiona Tecnología Espacial S.A.2. El Gobierno brasileño pretende utilizar el proyecto del SGDC, en el que participaron el actual Ministerio de Ciencia, Tecnología, Innovaciones y Comunicaciones (MCTIC), TELEBRAS, el Ministerio de Defensa (MD), la Agencia Espacial Brasileña (AEB) y el Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales (INPE), como modelo para la realización de otros proyectos estratégicos, tal como el del satélite radar de apertura sintética y del satélite meteorológico geoestacionario 3.
Antes del lanzamiento del SGDC-1, el segmento espacial del Sistema de Comunicaciones Militares por Satélite (SISCOMIS) del Ministerio de Defensa era atendido exclusivamente a través de la contratación de transpondedores en la banda X y de canales en la banda Ku por medio de servicios prestados por la empresa Embratel Star One.
Los estudios indicaron la necesidad del aumento de la capacidad satelital en banda X para atender a demandas futuras, como apoyo a las comunicaciones del Sistema Integrado de Monitoreo de las Fronteras (SISFRON), Sistema de Gestión de la Amazonía Azul (SisGAAz) y Sistema de Defensa Aeroespacial Brasileiro (SisGAAz) SISDABRA), entre otras4.
En el marco de esta realidad, el SGDC-1 fue adquirido para atender a las siguientes finalidades: hacer de Brasil independiente en cuanto al control y transporte de las informaciones estratégicas de gobierno, al proveer el Estado Brasileño de un recurso de telecomunicaciones dedicado, utilizando las bandas X y Ka ; y proporcionar capacidad satelital en la banda Ka, permitiendo la atención del Programa Nacional de Banda Ancha (PNBL) a nivel nacional y ofreciendo el acceso a usuarios ubicados en áreas remotas, de fronteras, en plataformas de petróleo, en islas oceánicas y, también, en áreas periféricas a los grandes centros.
El SGDC-1 opera, entonces, en las bandas Ka y X, y sus requisitos fueron definidos por el Programa Nacional de Actividades Espaciales3. El fabricante lanzó, posicionó y probó el satélite antes de entregarlo al control de Brasil. En Kourou, centro de lanzamientos de la Agencia Espacial Europea, ubicado en la Guayana Francesa, por el cohete Ariane 5 ECA de la empresa Arianespace, fue posicionado el 11 de junio de 2017 en su ubicación definitiva: en el meridiano 75 ° Oeste y el oeste a una altitud de 35.865 km de la superficie de la Tierra5.
Pasó efectivamente a integrar el Sistema de Comunicaciones Militares por Satélite (SISCOMIS), el 30 de junio de 2017, cuando el fabricante francés Thales Alenia Space (TAS) pasó el control total del satélite, que incluye la plataforma de los subsistemas (plataforma) la carga útil de comunicaciones (payload), en las bandas Ka y X, para los técnicos y especialistas brasileños de TELEBRAS y de las tres Fuerzas Armadas.
Aunque la conquista del dominio espacial es un gran desafío competitivo, particularmente considerando los costos asociados al desarrollo oa la adquisición de satélites geoestacionarios de gran tamaño, así como los elevados costos de su lanzamiento y de las vulnerabilidades inherentes al espacio, hay varios aspectos positivos en el empleo para fines militares, civiles o comerciales. Las comunicaciones por satélite aprovechan las ventajas de las características intrínsecas al dominio espacial, especialmente: rapidez en el tiempo de respuesta; cobertura con alcance continental con sólo un satélite; y posibilidad de soportar simultáneamente múltiples usuarios.
Las capacidades y los elementos del Poder Aeroespacial brasileño se incrementaron considerablemente en términos de infraestructura y recursos humanos especializados en actividades relacionadas al empleo aeroespacial. Se crearon el Centro de Operaciones Espaciales (COPE) y el Centro de Operaciones Espaciales Secundarias (COPE-S), que entraron efectivamente en operación, en el año 2017, en sus instalaciones provisionales. Además, decenas de militares y civiles brasileños fueron entrenados para realizar actividades de control, monitoreo y operación del SGDC-1.
Además de poseer cobertura de la señal en todo el territorio nacional y de disponer de una velocidad de tráfego de información compatible con las demandas actuales, tanto para aplicaciones civiles (banda Ka) y militares (banda X), el SGDC-1 proporciona seguridad a las comunicaciones al garantizar la confidencialidad, disponibilidad, autenticidad e integridad de la información y las comunicaciones. A pesar de no haber sido fabricados en Brasil, y de aún no dominar las tecnologías de fabricación o lanzamiento de satélites geoestacionarios, el control, el monitoreo y la operación del SGDC-1 son realizados por brasileños, en territorio nacional, dando a Brasil un incremento significativo en el poder aeroespacial brasileño.
FUENTE: EBlog - Ejército Blog Brasieiro