Decididamente no hay previsión en la Aviación Argentina de ningún tipo. El aeropuerto de Cordoba fue inaugurado por Cristina y por Mauricio en estos años y como podrán ver esta colapsado. Más allá de su terminal que es de las obras que nos tiene acostumbrado el Señor Eurnekian desde la época de Carlos Saul Ménem, pero lo más importante es la falta de infraestructura aeropuertuaria para la operación de las aeronaves.
El Miércoles aterrice en Aeroparque durante la tormenta que afectó la TMA Baires, como siempre los Controladores de Tránsito Aéreo no ven donde está el mal tiempo por lo tanto no pueden prever los huecos por donde podemos pasar.
En esos casos las aeronaves parecemos el Escuadrón Diabólico de Pier Novayuna desviándonos de la tormenta dándole aviso al control que solo puede limitarnos las alturas. Obviamente que si el radar del avión funciona mal o es mal utilizado por la tripulación el Control de Tránsito Aéreo NADA puede hacer para evitar que la aeronave se meta en un Cumulus Nimbus.
Para peor aterrizamos tres aeronaves en AEP pero como había tormentas en la vecindad del aeródromo se había cancelado la carga de combustible y por lo tanto los vuelos nocturnos estaban demorados o cancelados. Así que NO había posiciones disponibles para que entremos las tres aeronaves aterrizadas con pasajeros abordo.
Tuvimos que esperar 2 HORAS para que sacaran aeronaves que pernoctaban en AEP y los llevaran al sector industrial...
La revolución de los aviones de Guillermo Dietrich debiera ser primero invertir en lo que necesitan los aviones para operar...y después autorizar a que las empresas traigan los aviones en base a la capacidad de operación posible.
En la aviación CIVIL por lo menos nada debe ser PLANIFICADO para operar al 100% de capacidad disponible...que es lo que nos pasa hoy en los aeropuertos.
El Miércoles aterrice en Aeroparque durante la tormenta que afectó la TMA Baires, como siempre los Controladores de Tránsito Aéreo no ven donde está el mal tiempo por lo tanto no pueden prever los huecos por donde podemos pasar.
En esos casos las aeronaves parecemos el Escuadrón Diabólico de Pier Novayuna desviándonos de la tormenta dándole aviso al control que solo puede limitarnos las alturas. Obviamente que si el radar del avión funciona mal o es mal utilizado por la tripulación el Control de Tránsito Aéreo NADA puede hacer para evitar que la aeronave se meta en un Cumulus Nimbus.
Para peor aterrizamos tres aeronaves en AEP pero como había tormentas en la vecindad del aeródromo se había cancelado la carga de combustible y por lo tanto los vuelos nocturnos estaban demorados o cancelados. Así que NO había posiciones disponibles para que entremos las tres aeronaves aterrizadas con pasajeros abordo.
Tuvimos que esperar 2 HORAS para que sacaran aeronaves que pernoctaban en AEP y los llevaran al sector industrial...
La revolución de los aviones de Guillermo Dietrich debiera ser primero invertir en lo que necesitan los aviones para operar...y después autorizar a que las empresas traigan los aviones en base a la capacidad de operación posible.
En la aviación CIVIL por lo menos nada debe ser PLANIFICADO para operar al 100% de capacidad disponible...que es lo que nos pasa hoy en los aeropuertos.
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