Por el Com My (Ret) VGM Don Alejandro Vergara piloto de Bell 212 durante la Noble Gesta.
"REPLIEGUE DE UNA PATRULLA DEL GOE
Ya con todos los helicópteros en la pista de cuadreras de Puerto Argentino, se siguió operando sin descanso.
El día 28 de Mayo nuestro Jefe de Escuadrón el Mayor Pose Ortiz de Roas, recibe del CIC- Centro de información y Control donde estaba ubicado el puesto de comando de Fuerza Aérea, la orden de una misión para los helicópteros Bell.
La misma consistía en recuperar detrás de las líneas enemigas a una patrulla de nuestro GOE- Grupo de Operaciones Especiales( comandos).
Las patrullas del GOE eran infiltradas detrás de las líneas inglesas con el fin de observar sus movimientos y ser pasados estos al Puesto Comando en Puerto Argentino.
Cada tres o cuatro días eran trasladadas en helicópteros propios o del Ejército, para cumplir esa finalidad.
En ocasión de quedar una patrulla con personal del G.O.E. destacado en la zona ya tomada por las fuerzas Inglesas, se recibe la orden de ir a buscarlos y trasladarlos a Puerto Argentino.
Relata del piloto Ten. Héctor Ludueña
Realizamos el vuelo con los recaudos propios de la situación, al llegar a la zona indicada no percibíamos el personal a rescatar, al cabo de unos minutos comenzamos a observar a los integrantes del GOE, que al estar mimetizados con el terreno, no eran visibles a la tripulación del Bell .
Una vez hecho contacto, se coordina la cantidad de personal posible a ser trasladado, debido a los pesos y performance del helicóptero.
Coordinado esto, de inmediato suben al helicóptero, nuestros comandos del GOE.
Lamentablemente deben quedar en tierra tres de sus integrantes. En la oportunidad, se superaron totalmente los índices con máximo peso permitido para nuestro Bell.
Era sabido que si en esa situación se presentaba una pérdida de potencia de alguna turbina, la salida iba a quedar muy comprometida.
Los pilotos muy conscientes de ello, primaron el traslado del personal para que no quedaran expuestos a la merced de las tropas inglesas.
Casi con lo justo, el helicóptero puede despegar.
Al ir tomando velocidad, se sale de la situación riesgosa y el helicóptero empieza a obtener los parámetros normales para el vuelo.
¡ Una vez más el noble Bell demuestra sus bondades !!.
El vuelo se realiza con la inmensa satisfacción de trasladar a nuestros camaradas a nuestras propias líneas.
La tripulación que efectuara el vuelo fue: el Ten. Marcelo Jorge Pinto, el Ten. Héctor Ricardo Ludueña, el C.P. Alberto Pilar López y el C. 1° Sergio Quiñonez.¨
Relata el 1er. Teniente Salvador Ozán
Ese día, amparado en el crepúsculo malvinense, el H-85 realizó otra peligrosa misión para recuperar una patrulla de once hombres del Grupo de Operaciones Especiales, siendo yo su jefe, que había quedado detrás de las líneas enemigas.
La infiltración de la Patrulla para la "Exploración y Reconocimiento" al Norte del Lago "Colorado Pond" fue realizada el día 24 de Mayo.
La aproximación se hizo con helicópteros del Ejército Argentino UH-1H: El AE-412 y el AE-424.
Dada la cantidad de gente que conformaba la patrulla, todos no van a ser parte del vuelo de regreso a Puerto argentino.
Deben quedarse en tierra, lamentablemente, tres integrantes, el Teniente Sidders, el C.P. Korman y el C.P. Villaverde, que deberán, pernoctar en esa posición hasta el día siguiente.
COMPLETANDO LA MISIÓN
Relata del piloto Teniente Gustavo Brea
El día 29 de Mayo, recibimos la orden de ir a recuperar a los tres integrantes de la Patrulla del GOE que habían quedado sin subir al helicóptero el día anterior, y a un Puesto de Observación Aérea de la ROA de la BAM Malvinas, que hacía dos días no realizaba ningún tipo de transmisión radial.
Esto último, se suponía que era porque se habían quedado sin carga en las baterías de los equipos.
La tripulación para este vuelo fue: el Cholo Longar como Comandante de aeronave, yo como copiloto, y el C.1º Sergio Quiñones como Operador de Carga.
También a bordo estaban dos integrantes del GOE que sabían el lugar para recuperar a los otros integrantes, el 1er. Teniente Salvador Ozán y el C.1º Alfredo Aguayo.
Tomo la carta de vuelo visual y comienzo a realizar la planificación del vuelo. Debíamos ir al sur de la cadena montañosa que corre en orientación este-oeste, en la Isla Soledad, conocida por sus partes prominentes como ¨Alturas Rivadavia¨.
Ya con todo listo, pusimos en marcha en la pista de carreras cuadreras. Despegamos alrededor de las 08:15 hs., hacia el punto de recuperación, realizando vuelo de contorno del terreno, como medida de cubierta contra las vistas del enemigo y de autoprotección.
Durante el vuelo, se apreciaba la tensión que teníamos, estábamos volando en sectores donde las tropas inglesas ya eran dueñas de algunas posiciones.
La navegación de ida no fue lo suficientemente correcta, ya que equivoque al decirle a Longar el punto donde debía realizar el viraje hacia el objetivo previsto.
Gracias a que el Tordo conocía bien el lugar de recuperación, me dijo que el punto era otro y así llegamos al lugar.
En la aproximación de aterrizaje, había una laguna y a un costado de la misma, nuestro mecánico nos advierte que hay un pozo artificial y que en su interior se encuentra un hombre.
Nuestro combustible no era abundante, por lo que decidimos no realizar un sobrevuelo sobre el pozo. Podría ser un hombre enemigo y aislado.
Seguimos con nuestro vuelo. Al cabo de unos minutos aterrizamos y dejamos en tierra al 1er. Ten Ozán y al C. 1º Aguayo, para que hagan contacto con sus hombres.
Despegamos y pusimos rumbo norte para dirigirnos al lugar del POA. Mantuvimos ese rumbo hasta la ladera del Monte Simón, luego cambiamos rumbo y nos pusimos paralelos al arroyo Malo.
Durante el vuelo, Longar nos decía que el puesto había dejado de transmitir y que no sabíamos con qué nos podíamos encontrar.
La última vez que se abasteció a ese puesto, los integrantes habían dejado el mismo y el helicóptero tuvo que esperar a que regresaran con los rotores en marcha.
Constantemente el Cholo nos daba recomendaciones y entre ellas que tuviéramos los ojos bien abiertos a cualquier movimiento de tropas inglesas en las inmediaciones, por las dudas que el puesto haya sido tomado.
Llegamos a ¨Rincón del Zaino¨, rodeando al Cerro Malo, cambiando constantemente el rumbo y aprovechando al máximo las ondonadas del terreno, tratando que la silueta del helicóptero, no sea detectada e identificada por el enemigo.
Así llegamos a ¨Rincón del Picaso,¨ en un vuelo muy rasante, nos faltaba cruzar un espejo de agua con un establecimiento a la izquierda. Al alcanzar el terreno nuevamente, Longar acertadamente, nos hace introducir por una cañada para ocultarnos mejor.
Termina la cañada y ascendemos conforme al terreno. Delante a unos 8 km. se encuentra una loma y en la ladera sur el POA 5.
Delante nuestro a unos 100 mts. levemente a la derecha, ¡un helicóptero !! se encontraba en vuelo estacionario casi enfrentado a nosotros.
Aprieto el pulsador de intercomunicación y digo ¡ Es un Puma ¡!
Longar me contesta: ¡ Sí parece un Puma!!
Pasa un segundo y vemos que no tiene armamento a los costados, pasa otro segundo y ya estamos a 60 mts.y no podemos ver el costado.
Mis ojos buscan la cola, ella nos indicaría si nuestra apreciación era acertada.
Pues no lo era, en la cola tenía una rueda que tienen los helicópteros SEA KING.
Suenan todas las alarmas en mi cerebro, busco la matrícula, no la tiene, busco las franjas amarillas de aeronaves propias, no las tiene, busco en la pintura negra letras claras que digan Royal Navy, no las tiene.
Longar, nos dice ¡SON INGLESES, SON INGLESES !!!
Los sigo mirando y hacen un giro en estacionario hacia su izquierda, Longar al advertir esto, también hace un viraje por izquierda.
Cuando terminamos el viraje, alcanzo a ver al Sea King en actitud de alejamiento a alta velocidad, es justo en ese momento, cuando nos metemos en una hondonada.
Al salir de ella, me dice: Gato ve la bengala?
No la veo, le respondo.
Allí delante nuestro y arriba, es roja, me dice.
La busco en el cielo pero no la veo.
Ahora explotó, es un humo gris, allá arriba, me confirma.
No, no la veo, le respondo.
Según pude saber después, nos dispararon un misil desde nuestra retaguardia que pasó por sobre mi cabeza.
Esa luz roja que Longar pudo apreciar era el motor cohete del misil.
Trato de ubicarme en el terreno, pero estoy algo perdido.
Cruzamos imprevistamente un espejo de agua y el Tordo me dice: cayeron en poder de los ingleses, refiriéndose al POA 5.
Le digo entonces, señor no tengo idea de donde estamos. ¡!!!
Luego de volar unos minutos, ubicamos el Monte Simón y calculando el combustible remanente, Longar me dice, vamos a buscar a la patrulla del GOE.
Prácticamente sobre el mismo trayecto anterior, fuimos hasta el punto de reunión, ese lago interior.
Allí se encontraban todos los integrantes de la patrulla, subió Ozán y Aguayo y los tres nuevos que habían quedado desde el día anterior, Sidders, Villaverde y Korman.
Una vez todos dentro del helicóptero, emprendimos el regreso a nuestra base.
Aterrizamos en el hipódromo de carreras cuadreras con la satisfacción de haber traído a casa, a todos nuestros camaradas, los comandos del GOE."
Ilustro el informe del Cóndor Vergara con fotos de la maqueta que conservo, realizada a pedido en scratch, del Bell 212 H-85 con su última configuración y esquema empleado.
Saludos! César.
"REPLIEGUE DE UNA PATRULLA DEL GOE
Ya con todos los helicópteros en la pista de cuadreras de Puerto Argentino, se siguió operando sin descanso.
El día 28 de Mayo nuestro Jefe de Escuadrón el Mayor Pose Ortiz de Roas, recibe del CIC- Centro de información y Control donde estaba ubicado el puesto de comando de Fuerza Aérea, la orden de una misión para los helicópteros Bell.
La misma consistía en recuperar detrás de las líneas enemigas a una patrulla de nuestro GOE- Grupo de Operaciones Especiales( comandos).
Las patrullas del GOE eran infiltradas detrás de las líneas inglesas con el fin de observar sus movimientos y ser pasados estos al Puesto Comando en Puerto Argentino.
Cada tres o cuatro días eran trasladadas en helicópteros propios o del Ejército, para cumplir esa finalidad.
En ocasión de quedar una patrulla con personal del G.O.E. destacado en la zona ya tomada por las fuerzas Inglesas, se recibe la orden de ir a buscarlos y trasladarlos a Puerto Argentino.
Relata del piloto Ten. Héctor Ludueña
Realizamos el vuelo con los recaudos propios de la situación, al llegar a la zona indicada no percibíamos el personal a rescatar, al cabo de unos minutos comenzamos a observar a los integrantes del GOE, que al estar mimetizados con el terreno, no eran visibles a la tripulación del Bell .
Una vez hecho contacto, se coordina la cantidad de personal posible a ser trasladado, debido a los pesos y performance del helicóptero.
Coordinado esto, de inmediato suben al helicóptero, nuestros comandos del GOE.
Lamentablemente deben quedar en tierra tres de sus integrantes. En la oportunidad, se superaron totalmente los índices con máximo peso permitido para nuestro Bell.
Era sabido que si en esa situación se presentaba una pérdida de potencia de alguna turbina, la salida iba a quedar muy comprometida.
Los pilotos muy conscientes de ello, primaron el traslado del personal para que no quedaran expuestos a la merced de las tropas inglesas.
Casi con lo justo, el helicóptero puede despegar.
Al ir tomando velocidad, se sale de la situación riesgosa y el helicóptero empieza a obtener los parámetros normales para el vuelo.
¡ Una vez más el noble Bell demuestra sus bondades !!.
El vuelo se realiza con la inmensa satisfacción de trasladar a nuestros camaradas a nuestras propias líneas.
La tripulación que efectuara el vuelo fue: el Ten. Marcelo Jorge Pinto, el Ten. Héctor Ricardo Ludueña, el C.P. Alberto Pilar López y el C. 1° Sergio Quiñonez.¨
Relata el 1er. Teniente Salvador Ozán
Ese día, amparado en el crepúsculo malvinense, el H-85 realizó otra peligrosa misión para recuperar una patrulla de once hombres del Grupo de Operaciones Especiales, siendo yo su jefe, que había quedado detrás de las líneas enemigas.
La infiltración de la Patrulla para la "Exploración y Reconocimiento" al Norte del Lago "Colorado Pond" fue realizada el día 24 de Mayo.
La aproximación se hizo con helicópteros del Ejército Argentino UH-1H: El AE-412 y el AE-424.
Dada la cantidad de gente que conformaba la patrulla, todos no van a ser parte del vuelo de regreso a Puerto argentino.
Deben quedarse en tierra, lamentablemente, tres integrantes, el Teniente Sidders, el C.P. Korman y el C.P. Villaverde, que deberán, pernoctar en esa posición hasta el día siguiente.
COMPLETANDO LA MISIÓN
Relata del piloto Teniente Gustavo Brea
El día 29 de Mayo, recibimos la orden de ir a recuperar a los tres integrantes de la Patrulla del GOE que habían quedado sin subir al helicóptero el día anterior, y a un Puesto de Observación Aérea de la ROA de la BAM Malvinas, que hacía dos días no realizaba ningún tipo de transmisión radial.
Esto último, se suponía que era porque se habían quedado sin carga en las baterías de los equipos.
La tripulación para este vuelo fue: el Cholo Longar como Comandante de aeronave, yo como copiloto, y el C.1º Sergio Quiñones como Operador de Carga.
También a bordo estaban dos integrantes del GOE que sabían el lugar para recuperar a los otros integrantes, el 1er. Teniente Salvador Ozán y el C.1º Alfredo Aguayo.
Tomo la carta de vuelo visual y comienzo a realizar la planificación del vuelo. Debíamos ir al sur de la cadena montañosa que corre en orientación este-oeste, en la Isla Soledad, conocida por sus partes prominentes como ¨Alturas Rivadavia¨.
Ya con todo listo, pusimos en marcha en la pista de carreras cuadreras. Despegamos alrededor de las 08:15 hs., hacia el punto de recuperación, realizando vuelo de contorno del terreno, como medida de cubierta contra las vistas del enemigo y de autoprotección.
Durante el vuelo, se apreciaba la tensión que teníamos, estábamos volando en sectores donde las tropas inglesas ya eran dueñas de algunas posiciones.
La navegación de ida no fue lo suficientemente correcta, ya que equivoque al decirle a Longar el punto donde debía realizar el viraje hacia el objetivo previsto.
Gracias a que el Tordo conocía bien el lugar de recuperación, me dijo que el punto era otro y así llegamos al lugar.
En la aproximación de aterrizaje, había una laguna y a un costado de la misma, nuestro mecánico nos advierte que hay un pozo artificial y que en su interior se encuentra un hombre.
Nuestro combustible no era abundante, por lo que decidimos no realizar un sobrevuelo sobre el pozo. Podría ser un hombre enemigo y aislado.
Seguimos con nuestro vuelo. Al cabo de unos minutos aterrizamos y dejamos en tierra al 1er. Ten Ozán y al C. 1º Aguayo, para que hagan contacto con sus hombres.
Despegamos y pusimos rumbo norte para dirigirnos al lugar del POA. Mantuvimos ese rumbo hasta la ladera del Monte Simón, luego cambiamos rumbo y nos pusimos paralelos al arroyo Malo.
Durante el vuelo, Longar nos decía que el puesto había dejado de transmitir y que no sabíamos con qué nos podíamos encontrar.
La última vez que se abasteció a ese puesto, los integrantes habían dejado el mismo y el helicóptero tuvo que esperar a que regresaran con los rotores en marcha.
Constantemente el Cholo nos daba recomendaciones y entre ellas que tuviéramos los ojos bien abiertos a cualquier movimiento de tropas inglesas en las inmediaciones, por las dudas que el puesto haya sido tomado.
Llegamos a ¨Rincón del Zaino¨, rodeando al Cerro Malo, cambiando constantemente el rumbo y aprovechando al máximo las ondonadas del terreno, tratando que la silueta del helicóptero, no sea detectada e identificada por el enemigo.
Así llegamos a ¨Rincón del Picaso,¨ en un vuelo muy rasante, nos faltaba cruzar un espejo de agua con un establecimiento a la izquierda. Al alcanzar el terreno nuevamente, Longar acertadamente, nos hace introducir por una cañada para ocultarnos mejor.
Termina la cañada y ascendemos conforme al terreno. Delante a unos 8 km. se encuentra una loma y en la ladera sur el POA 5.
Delante nuestro a unos 100 mts. levemente a la derecha, ¡un helicóptero !! se encontraba en vuelo estacionario casi enfrentado a nosotros.
Aprieto el pulsador de intercomunicación y digo ¡ Es un Puma ¡!
Longar me contesta: ¡ Sí parece un Puma!!
Pasa un segundo y vemos que no tiene armamento a los costados, pasa otro segundo y ya estamos a 60 mts.y no podemos ver el costado.
Mis ojos buscan la cola, ella nos indicaría si nuestra apreciación era acertada.
Pues no lo era, en la cola tenía una rueda que tienen los helicópteros SEA KING.
Suenan todas las alarmas en mi cerebro, busco la matrícula, no la tiene, busco las franjas amarillas de aeronaves propias, no las tiene, busco en la pintura negra letras claras que digan Royal Navy, no las tiene.
Longar, nos dice ¡SON INGLESES, SON INGLESES !!!
Los sigo mirando y hacen un giro en estacionario hacia su izquierda, Longar al advertir esto, también hace un viraje por izquierda.
Cuando terminamos el viraje, alcanzo a ver al Sea King en actitud de alejamiento a alta velocidad, es justo en ese momento, cuando nos metemos en una hondonada.
Al salir de ella, me dice: Gato ve la bengala?
No la veo, le respondo.
Allí delante nuestro y arriba, es roja, me dice.
La busco en el cielo pero no la veo.
Ahora explotó, es un humo gris, allá arriba, me confirma.
No, no la veo, le respondo.
Según pude saber después, nos dispararon un misil desde nuestra retaguardia que pasó por sobre mi cabeza.
Esa luz roja que Longar pudo apreciar era el motor cohete del misil.
Trato de ubicarme en el terreno, pero estoy algo perdido.
Cruzamos imprevistamente un espejo de agua y el Tordo me dice: cayeron en poder de los ingleses, refiriéndose al POA 5.
Le digo entonces, señor no tengo idea de donde estamos. ¡!!!
Luego de volar unos minutos, ubicamos el Monte Simón y calculando el combustible remanente, Longar me dice, vamos a buscar a la patrulla del GOE.
Prácticamente sobre el mismo trayecto anterior, fuimos hasta el punto de reunión, ese lago interior.
Allí se encontraban todos los integrantes de la patrulla, subió Ozán y Aguayo y los tres nuevos que habían quedado desde el día anterior, Sidders, Villaverde y Korman.
Una vez todos dentro del helicóptero, emprendimos el regreso a nuestra base.
Aterrizamos en el hipódromo de carreras cuadreras con la satisfacción de haber traído a casa, a todos nuestros camaradas, los comandos del GOE."
Ilustro el informe del Cóndor Vergara con fotos de la maqueta que conservo, realizada a pedido en scratch, del Bell 212 H-85 con su última configuración y esquema empleado.
Saludos! César.
