HIROSHIMA y NAGASAKI, Capítulo final IIGM
Hiroshima y Nagasaki
Capítulo final de la IIGM
En abril de 1945, el general Curtis Le May, que se encontraba al frente de los aviones B-29 del 21º Comando de Bombardeo, declaró: “ Creo que la destrucción de la capacidad del Japón para hacer la guerra está dentro de las posibilidades de este mando…”
Artículo basado en el trabajo del SM (R) Alejandro del Pino
Aparecido en la revista Aeroespacio nº 416 del año 1980.
Presidente Harry Truman...
Después que el presidente de los EE.UU. aprobó el empleo de la bomba atómica, el comandante de las Fuerzas Aéreas Estratégicas en el Pacífico expidió el 25 de Julio de 1945 la siguiente disposición:
1) El Grupo Mixto 509º de la 20ª Fuerza Aérea lanzará su primera bomba especial tan pronto como el tiempo permita el bombardeo visual, después del 3 de agosto de 1945, sobre uno de los siguientes objetivos: Hiroshima, Kokura, Niigata o Nagasaki.
2) Cuando el personal asignado al proyecto prepare más bombas, se lanzarán otras adicionales sobre los objetivos arriba citados. Se impartirán instrucciones posteriores sobre otros objetivos.
3) Se recomienda el mantenimiento estricto del secreto militar, subscriptos en la doctrina de Seguridad Nacional, firmada y aceptada por el Presidente.
4) Se aclara que la disposición de estricto secreto de estado tiene la aprobación del secretario de Guerra y del jefe del Estado Mayor General.
LOS OBJETIVOS
Los objetivos fueron seleccionados por las siguientes razones: Hiroshima ocupaba el octavo lugar entre las ciudades del Japón. Situada en la parte baja de Honshu, con un puerto que se abre al Mar Interior, era de mucha importancia para el tráfico marítimo y la sede del cuartel general del II Ejército y del Ejército Regional. El área industrial estaba muy desarrollada y todavía no había sido atacada. Kokura estaba ubicada en la isla de Kiushiu y tenía una de las fábricas más importantes del país. Niigata era un puerto de importancia, ubicado en Honshu, y tenía una gran capacidad industrial. Nagasaki era un gran centro industrial y tenía un puerto de interés militar. Kioto, ciudad industrial y antigua capital del Imperio, fue eliminada de la lista; Niigata fue descartada por su excesivo alejamiento; y Nagasaki quedó en estudio para ser eventualmente reemplazada por Osaka, Amagasaki y Omuta, si los servicios de Inteligencia informaban sobre la existencia de campos de prisioneros en las cercanías.
La Orden de Operaciones Nº 13 determinaba que el objetivo a atacar el 6 de agosto de 1945 por la 20ª Fuerza Aérea era el área industrial y urbana de Hiroshima; como objetivo secundario se fijaba Kokura y en tercer lugar, Nagasaki. La altura de vuelo sería a 9.000 metros y la velocidad de bombardeo de más de 500 km/h.
El lanzamiento de la segunda bomba fue previsto en la Orden de Operaciones Nº 17, y el objetivo principal era Kokura, mientras que el secundario era Nagasaki. La orden fue impartida a posteriori de la acción sobre Hiroshima y la operación fue bautizada con el nombre de “Centerboard”.
LOS HOMBRES
Coronel Paul Tibbets junto al Enola Gay...
Tripulación del Enola Gay
La misión exigía personal de óptima calidad y después de una rigurosa selección, se designó al coronel Paul W. Tibbets, de Miami, Florida.
Tibbets tenía 25 salidas de combate en B-17 sobre África, y en Europa actuaba en el 97º Grupo Aéreo. Se destacaba por sus conocimientos de ingeniería, sus dotes de mando y su valor. Se ocupó de elegir personalmente a los miembros de las tripulaciones y con el material que recibió organizó el Grupo Mixto 509º, integrado en el Ala 313ª, pero que recibía órdenes directas del 21º Comando de Bombardeo y posteriormente de la 20ª Fuerza Aérea.
La primera misión del Cnl. Tibbets se cumplió sobre Hiroshima y la tripulación que lo acompañó en esas circunstancias estaba compuesta por el capitán Robert Lewis, ex piloto de pruebas de B-29 en Alamogordo, copiloto; capitán Teodore Van Kirk, 23 años, había trabajado con Tibbets en Europa, navegante; mayor Thomas W. Ferebee, también había sido subordinado del coronel en Europa, bombardeo; 2º teniente Jacobo Beser, estudiante de ingeniería, a cargo de las contramedidas electrónicas; sargento Joe Stiborik, 29 años, operador de radar; sargento George R. Caron, 25 años, ametrallador de cola; cabo Richard H. Nelson, operador de radio; sargento Wyatt Duzembury, elegido por su habilidad para afrontar emergencias, mecánico de vuelo; y suboficial Robert H. Shumard, mecánico ayudante. En calidad de tripulante especial se embarcó el capitán de navío Williams Parsons, director adjunto del laboratorio de investigaciones atómicas en Los Älamos, y testigo de la prueba en Alamogordo. Su tarea era desempeñarse como observador científico y armador de la bomba nuclear en vuelo; además era el único tripulante que conocía todos los secretos del arma a ser lanzada. El nombre clave de este miembro del equipo dentro del proyecto “Manhattan” era “Judge” (Juez).
Mayor Charles Sweeney
El B-29 "Bock's car" de Sweeney y su tripulación
La tripulación que operó sobre Nagasaki se integró con el mayor Charles W. Sweeney, comandante de aeronave y jefe de misión, que había ingresado a la AAF en 1941 y ya en 1943, a los 23 años de edad y con el grado de capitán, actuaba como piloto de pruebas en Eglin, Florida; teniente primero Charles D. Albury, recibido de piloto a los 18 años, ingresó en la universidad de Miami y en 1942 era cadete del aire, copiloto; capitán Kermit K. Beahan, 26 años, con una vasta experiencia en Europa, África y el Pacífico, poseía la cruz de Vuelo Distinguido y había sido derribado en cuatro oportunidades, bombardero; capitán James F. Pelt, de Virginia, 27 años, navegador; sargento mayor John D. Kukarek, profesional con gran antigüedad en el servicio, mecánico; teniente Albert Dehart, 35 años, uno de los mejores ametralladoristas del Ejército, ametrallador de cola; sargento Edward K. Buckley, 35 años, ayudante radarista; teniente Jacob Beser, radarista. El 2º copiloto, teniente Fred Olivi era el más joven de la tripulación – 22 años – y el único que no había participado en la misión sobre Hiroshima.
Completaba este equipo el comandante de la US Navy Frederick L. Ashworth, un experto en artillería, que estaba a cargo de la bomba en vuelo y tenía el nombre clave de “Scathe”. Además su responsabilidad se extendía a la elección de la base desde donde iba a operar el Grupo Mixto 509º, y su decisión recayó en la isla Tinian, del archipiélago de las Marianas.
La base en la isla Tinian de las Marianas
EL ALISTAMIENTO
El Grupo de bombardeo se codificó con el nombre del “Silver Plate” y el material aéreo que se le proveyó fueron los aviones B-29 Superfortress, con amplios antecedentes en la campaña del Pacífico. El mayor general Echols asumió la responsabilidad técnica de adecuar la aeronave para el transporte de la bomba atómica, aunque en un principio se habló de usar un Avro Lancaster.
La bomba arrojada sobre Hiroshima producto de seis años de investigación, fue bautizada “Thin Man” (Hombre delgado) y luego “Little boy” (muchachito). Sus características eran: largo 4,25 m; diámetro 1,50 m; peso 4100 kg. Era una bomba de fisión de uranio 235 y tenía una espoleta para hacerla estallar a 550 metros de altura (explosión áerea), liberando una energía equivalente a 20.000 tn de TNT. La que se usó en Nagasaki fue denominada “Fat Man” (Gordo), usaba plutonio y se basaba en el método de la implosión. Sus características eran: 1,50 m de diámetro; 3,50 m de largo y 4,5 tn de peso, y la potencia era análoga a la anterior. La masa hipercrítica se lograba con el concurso de una corona de 64 detonadores y estaba preparada para realizare explosión aérea a 600 metros.
La tristemente célebre nuke de uranio Little Boy de Hiroshima...
Y aquí la nuke de plutonio "Fat Man" de Nagasaki...
Considerando que los B-29 eran utilizados en bombardeos de zona, las tripulaciones elegidas se sorprendieron cuando se les encomendó práctica de bombardeo sobre blancos punto y se eliminó la mayor parte del armamento defensivo, salvo las dos ametralladoras de cola. El Grupo Mixto 509º inició su adiestramiento en combate a partir del 30 de junio de 1945, operando sobre Iwo Jima, Truck y Rota, y los procedimientos usados consistían en lanzamientos a gran altura, vuelos acompañados y cambios de rumbo inmediatos después de arrojar las bombas. Tal era el secreto que se guardaba sobre las actividades de esta unidad, que los propios norteamericanos supieron de su existencia por medio de la audición radial japonesa “Rosa de Tokio”. Se trataba de una locutora oficial de la radio japonesa que transmitía en inglés noticias de acción psicológica dirigidas al enemigo.
EL BOMBARDEO
Calles de Hiroshima...
Las instrucciones previas al vuelo fueron impartidas el 5 de agosto por la noche y luego un capellán rezó una plegaria ante las tripulaciones reunidas. A la 01:37 del 6 de agosto despegaron desde pistas separadas tres B-29 con destino a Hiroshima y Kokura para informar sobre las condiciones del tiempo en el área de los probables blancos. Algún tiempo después decoló el bombardero Nº 82, llamado “Enola Gay” en honor de la madre de su comandante, el Cnl. Tibbets, y cuya matrícula era AAF 44-86292.
A las 06:40 hs el “Enola Gay” inició el ascenso hacia los 9.000 metros y a las 07:25hs el avión meteorológico que volaba sobre Hiroshima informó que el tiempo era bueno, definiendo así el blanco primario. A las 08:09 hs el Cnl. Tibbets ordenó el alistamiento de la bomba y el My. Ferebee recibió el mando del avión algunos minutos después. Se calculó que la explosión se produciría 43 segundos después de salir la bomba.
El lanzamiento se hizo exactamente a las 08:16 hs del 6 de agosto de 1945, dando comienzo a una nueva era: la atómica… De inmediato retomó el mando el comandante y con un rápido viraje a la derecha se dirigió hacia su base.
El hongo que acaba de consumir miles y miles de vidas en Hiroshima...
Testimonial reloj detenido en la trágica hora fijada...
Japón se negó a rendirse después de Hiroshima y ello obligó a poner en marcha la Orden de Operaciones Nº 17 a partir de la noche del 8 de agosto. El avión que transportaba la bomba de plutonio era llamado “Bock’s car”. Erróneamente, muchos autores atribuyen al “Great Artist” la portación de la bomba lanzada sobre Nagasaki. Los aviones meteorológicos despegaron a las 02:30 hs y el aparato del My. Sweeney salió a las 03:49 hs. Los informes del tiempo establecían que Kokura tenía cielo despejado y Nagasaki solamente 2/10 de nubosidad, por lo cual ambos objetivos estaban en condiciones de ser atacados.
El “Bock’s car” voló sobre Kokura a las 09:50 hs., designado objetivo primario, pero en esos momentos una espesa capa de humo cubría el blanco y la artillería antiaérea se mostraba activa. Al no poder hacer el lanzamiento visualmente, el My. Sweeney cambió el rumbo hacia Nagasaki pero la decisión provocó alguna inquietud por la estrechez de la autonomía, reducida por una espera inesperada en el punto de reunión y sobre el objetivo primario. El remanente de combustible permitía una sola corrida de bombardeo sobre el blanco: Nagasaki. Y el retorno inmediato a la base de alternativa prevista: Iwo Jima.
Cuando a las 10:50 hs. el atacante volaba próximo al objetivo, la nubosidad había aumentado a 7/10 y se ordenó, a pesar de las disposiciones existentes, la preparación del lanzamiento por radar. Sin embargo, cuando el B-29 comenzó a sobrevolar la ciudad la nubosidad se despejó y, exactamente, a las 11:01 hs. se realizó el bombardeo por visual. La bomba explotó a 5 km del punto cero prefijado, en el valle de Urakami, pero paradójicamente, y, debido a las características de la superficie, la destrucción fue mayor que si el artefacto hubiera caído en el lugar previsto. El regreso fue dramático por la escasez de combustible y el avión tocó tierra en condiciones de verdadera emergencia en Okinawa, con uno de sus motores detenidos.
Ruinas de Nagasaki...
EPÍLOGO
Tres días después del bombardeo de Nagasaki, Japón se rindió. Las misiones cumplidas por el Cnl. Tibbets y el My. Sweeney dieron mucho que hablar, pero el My. Thomas W. Ferebee, en 1960, realizó algunas declaraciones que sintetizan el estado de ánimo de aquellos que tuvieron la responsabilidad crucial en ese histórico momento: “Yo tenía que llevar a cabo una misión concreta y lo hice. Tenía que ejecutar una orden y la ejecuté. Desde el momento en que se me había confiado una misión, mi único deber era cumplirla a la perfección. Por ello sobrevolé numerosas veces los objetivos del Japón. Conocía a Hiroshima, desde el aire, por supuesto, tanto como mi ciudad natal. No me pregunten si tengo un complejo de culpabilidad. Ese asunto no concierne a nadie más que a mí… Únicamente puedo decir esto: desde el punto de vista estratégico militar, que es lo que interesa realmente, se obtuvo el máximo resultado puesto que poco después de mi raid sobre Hiroshima se anunció el fin de la guerra…”
Impresión, restos humanos en una pared...
Una sombra, apenas una silueta que aún espera...
Imagen posterior tras la ocupación y estudio del terreno en Hiroshima...