Acciones varias de las distintas guerras

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Este tipo de submarinos eran enviados por los nazis desde Europa para asentarse en las estaciones orientales cedidas por los japoneses. No obstante, de los 14 que se enviaron, solo cuatro regresaron al viejo continente.
El submarino encontrado, el U-168, salió de Francia en julio de 1943 y llegó a Penang en noviembre del mismo año. Después de servir en varios combates, el U- 168 fue hundido pasada la medianoche del 6 de octubre de 1944 en el Mar de Java por un torpedo de un submarino holandés, dejando 23 muertos y 27 supervivientes.
Por si alguien esta interesado:
Die Gruppe Monsun
 

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Francisco Wichter, el último sobreviviente
Fue parte de la emblemática Lista de Schindler y distinguido como Personalidad Destacada de los Derechos Humanos. Relata el horror del Holocausto en primera persona.

Nota de la Revista Veintitrés
–¿Sabe qué pasó con su hermana y con los demás?
–Salimos hacia un bosque y poco después mi hermana se quedó con una familia polaca y nunca más supe de ella. Caminábamos toda la noche y nos tapábamos con las hojas de los árboles. Conocí varios asentamientos pero no me quedé quieto porque me parecían emboscadas. Hasta que me enteré de un campo que servía como fábrica de aviones. Allí había obreros judíos que eran forzados a trabajar y por la noche los conducían a dormir a otro lado. Me colé hacia adentro, un día en el que no se trabajaba porque justo habían cambiado el comandante, y me descubrieron.
–¿De qué manera lo recibieron?
–Me quedé varias horas en una pieza hasta que me sacaron y me presentaron ante el comandante judío. Me llevaron a un sótano y me prometieron comida pero fui encerrado con llave y dormí con lo puesto sobre el cemento. Pasé varios días en ese lugar y fue llegando más gente hasta que fuimos diez. Pasamos un mes sin bañarnos, los demás hablaban de sus familias y de la comida, y yo les pedía que se callaran, que debíamos olvidar para seguir adelante. Una tarde casi de noche vino un policía con la orden de que saliéramos y se me ocurrió desobedecer. Hoy mismo no sé si tendrá que ver el destino o un sexto sentido. Los demás salieron contentos y me quedé en la penumbra, pasaron tres días y volvió a entrar el mismo policía, que se asustó al verme. Cuando el comandante ordenó que me bañaran y afeitaran tuve el presentimiento de que iba a sobrevivir, más cuando me enteré que aquella noche y a causa de un preso que había escapado, fusilaron a todos mis compañeros de sótano.
–¿Cómo llegó a la fábrica de los Schindler?
–Una noche nos hicieron formar a los 2.600. Ordenaron que quienes tuvieran oficio debían formar a la derecha y yo me puse a la izquierda. A los 600 que quedamos nos evacuaron en un tren a Cracovia y de ahí a un campo de Plasciov donde por primera vez escuché hablar del empresario Oskar Schindler, que estaba haciendo una lista de mil hombres y doscientas mujeres para una nueva fábrica en los Sudetes.
–¿Qué fabricaban?
–Las bases de acero que servirían para rellenar de pólvora para armar minas antitanques.
–¿Cuál era su función?
–Ninguna, la fábrica podía funcionar con 500 y éramos 1.300, sobraban obreros. Llegaron dos meses después desde Auschwitz y nunca trabajaron. Teníamos calefacción, usina a carbón, nadie pasaba frío y nos bañábamos y hasta había una balanza donde nos pesábamos y llevaban un registro. Era un oasis en la luna, no faltaba nada y no pasábamos hambre. Cada empresario debía alimentar a su gente y debía pagar al Estado alemán por cada obrero calificado y entonces, Schindler habrá tenido que pagar todo lo que tenía para alimentarnos. El campo y la fábrica funcionaban en el mismo lugar y cada domingo nos daban algo extra para comer.
El 8 de mayo de 1945, los prisioneros vieron llegar a electricistas que montaron una instalación. Esa noche, Oskar y su esposa Emily llegarían con una novedad. Todos escucharon a Winston Churchill en la radio anunciando el fin de la guerra, la rendición alemana. Al día siguiente, los dueños de la fábrica abrieron un vagón desde donde extrajeron cortes de tela de tres metros para cada trabajador. Wichter obtuvo hilos de buena calidad, agujas y dedales, se quedó cuatro días más y junto con otros compañeros siguió su camino. Tomaron un tren rumbo a Cracovia y se alojaron en un edificio deshabitado. Había que procurar dinero, cada uno vendió lo suyo.
–¿La película fue fiel a los hechos?
–No es un documental, hay muchos cambios con respecto a la realidad pero tuvo su importancia.
La lista de Schindler, de Steven Spielberg, se estrenó en la Argentina en 1994 y se supo que la viuda del empresario vivía en una localidad rural cercana a Buenos Aires. Wichter se reencontró con ella, y el film disparó su necesidad de contar los hechos. “Desde que llegué con mi esposa en 1947, nunca más hablamos hasta que se presentó la película. Nos pusimos a construir una familia, a trabajar con constancia. Mi esposa, también sobreviviente, sabía de tejedurías y yo aprendí a ser sastre de ropa de cuero. Con paciencia llegamos hasta acá y somos cuatro generaciones”.
–¿Cómo llegaron al país?
–Tuvimos que cruzar las fronteras con visas de Paraguay. Los paraguayos se avivaron e hicieron negocio porque por cada pedido cobraban 100 dólares que en aquellos tiempos era mucho. Recién casados, con mi esposa fuimos de Roma a Génova en tren, presentamos los papeles en el consulado paraguayo donde nos hicieron preguntas formales y a la semana nos dieron las visas. Estuvimos en Río de Janeiro un mes y medio en un hotel pagado por una institución judía, que también abonó los pasajes en barco y el avión hasta la frontera brasileña de Uruguayana con Paso de los Libres. Pasamos una noche en un granero de una gente conocida y al otro día tomamos el tren a Buenos Aires donde teníamos una tía. Fue difícil viajar indocumentados pero Paraguay estaba convulsionado y no podíamos entrar. Hasta para cruzar el río Paraná tuvimos que ir corriéndonos de vagón.
–¿Por qué se decidió a contar su historia?
–Es muy fuerte la carga de lo visto, de lo vivido, de lo perdido en esos años, y tenemos que prevenir a las generaciones presentes. Que no permitan que hechos semejantes se repitan con ningún ser humano. Es el legado, la última voluntad de mi madre en vida. No voy a hablar de las cámaras de gas y de todo lo demás que vi, que es increíble. Hace poco en un acto conté mi historia y muchos lloraron, y es que no tuvimos juventud porque nos vimos envueltos en aquello. Hablar fue aliviar la carga que cada uno lleva pero que debe transmitir. Ojalá nadie tenga que ver algo tan terrible.
–¿Volvió a ver a Emily Schindler?
–La vi por primera vez en la sede de la AMIA y después de un rato reconoció que yo sabía más sobre el funcionamiento de la fábrica. Después, la fui a visitar varias veces.
Francisco Wichter habla de las trampas del destino, de la intuición que lo ayudó muchas veces a cambiar de fila, a percibir el peligro. Asegura que jamás entró en pánico, y un poco en chiste, que muchas veces ser bajito de estatura ayuda. Acompaña a los visitantes en el ascensor y los saluda, apretando sus manos con fuerza.
infonews
 

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La curiosa historia del barco militar que fabricaba helados durante la II Guerra Mundial
El reparto de miles de litros de helado ayudó a elevar la moral de las tropas estadounidenses que luchaban contra Japón

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La curiosa historia del barco militar que fabricaba helados durante la II Guerra Mundial
En momentos de depresión o baja autoestima, alimentos como el chocolate o los helados son un recurso habitual para tratar de elevar la moral de quien sufre esa apatía. En periodos de conflictos bélicos, donde casi cualquier solución es válida para mantener contentos a los soldados, esta perla de la sabiduría popular no podía ser ignorada por los mandos militares.
De hecho, tal y como podemos leer en el blog «La Aldea Irreductible», el poder reconstituyente del helado fue tomado tan en serio que, en plena Segunda Guerra Mundial, la marina de Estados Unidos construyó un buque, el «Ice Cream Barge», encargado de fabricar y distribuir miles de toneladas de este producto entre los barcos y bases que tenía desplegados en el Pacífico Sur.
Todo comenzó, cuando la cúpula militar buscaba soluciones para los principales problemas que el clima caluroso de la zona y la baja moral causaba entre las tropas. El consumo de helados, habitualmente prescrito por los médicos a los soldados para recuperarse de la fatiga, era una respuesta ideal, ya que atacaba ambos problemas a la vez.
Así, a partir de 1943, se distribuyeron más de 61.000 toneladas de helado deshidratado entre todas las bases militares del Pacífico Sur. Con un poco de agua y siguiendo las instrucciones que indicaba la lata del producto para diluir el polvo, cualquier soldado podía obtener su propio helado de vainilla.
Sin embargo, el secretario de la Marina de los Estados Unidos, James Forrestal, estaba convencido del enorme beneficio de incluir este alimento en la dieta de los soldados. Por ello, decidió dar máxima prioridad a su distribución y, en 1945, se las ingenió para convencer a la Comisión Nacional de Presupuestos para que apoyaran su plan.
Con el millón de dólares que obtuvo, Forrest ordenó construir el barco más insospechado de la Segunda Guerra Mundial: uno destinado única y exclusivamente a la fabricación de helados. Conocido como «Ice Cream Barge», era una barcaza remolcada capaz de producir alrededor de 300 litros de helado cada hora que distribuía por todas las bases del Pacífico Sur.
El «Ice Cream Barge», además de ser la primera heladería flotante y ambulante del mundo, sin duda hizo las delicias de muchos de los soldados, a la vez que les sirvió de cierto apoyo moral mientras combatían en unos campos de batalla muy alejados de su hogar. Un curioso uso de los helados, quizá solo superado por el de los caramelos de chocolate que salvaron la vida de un batallón de marines en la Guerra de Corea.
ABC.es
 

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Las andanzas del cadáver de Mussolini

El cuerpo sin vida del «Duce» estuvo 12 años en paradero desconocido, en escondites tan sorprendentes como el maletero de un coche, una pequeña caja o un simple armario

ABC
El cadáver de Mussolini en el forense y colgado de una plaza en Milán, en abril de 1945
En una tumba anónima, en el maletero de un coche, en una pequeña caja, debajo de un altar en un convento desconocido, en un armario... Estos fueron los destinos del cadáver de Benito Mussolini después de que fuera descubierto y fusilado por un grupo de partisanos en Dongo, el 28 de abril de 1945. El Duce no descansó en paz ni aquel día, ni al día siguiente, cuando su cuerpo y el de su amante Clara Petacci fueron colgados cabeza abajo y golpeados, escupidos, orinados e, incluso, mutilados públicamente en una plaza céntrica de Milán. Pero tampoco lo hizo en los 12 años que estuvo el dictador muerto en paradero desconocido, escondido por los rincones más insospechados de Italia.

ABC
Retrato de Mussolini de 1940
Sobre los verdaderos autores de su ejecución y las circunstancias en que se produjo existen aún muchas incógnitas . Alguno de sus descendientes incluso ha solicitado recientemente la exhumación de sus restos para tratar de identificar a los asesinos. Pero sí se conocen bien las andanzas del «Duce» una vez muerto, por lo menos ahora, porque el secretismo que rodeó a este asunto durante años dio para llenar de rumores muchas páginas de periódicos. «Roma estaba de nuevo alerta (...), porque existía la confidencia de que un camión, con matrícula de Milán número 22457, transportaba el cuerpo de Mussolini rodeado de varios “jeeps” como escolta», podía leerse, por ejemplo, en ABC en mayo de 1946. «Ni ha aparecido el camión, ni los “jeeps”, ni como es consiguiente el cuerpo de Mussolini, que otras noticias lo señalan escondido en Florencia», aclaraba después.
Sabemos que después del escarnio público sufrido en Milán, el cuerpo de Mussolini fue colocado por miembros del Comité de Liberación Nacional (CLN) en un cajón de madera con paja y enterrado en una tumba sin nombre en el cementerio Mayor, identificada con el número 384. El objetivo era impedir el peregrinaje de nostálgicos.
El robo del cuerpo
La noche del 23 de abril de 1946, una vez acabada la Segunda Guerra Mundial, un grupo de simpatizantes fascistas robaron los restos del Duce sin saber muy bien qué hacer con ellos. Hasta dos semanas estuvo el cadáver peregrinando por las calles de Milán en el maletero de un coche. El venerado y poderoso aliado de Hitler, símbolo de fortaleza en toda Europa, daba vueltas, muerto, escondido y olvidado, en el maletero de un vehículo. Finalmente, uno de sus ladrones decidió entregárselo a un sacerdote milanés del convento de SantŽAngelo.

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ABC sobre la capitulación de Francia en 1940, con Mussolini (izda.), Hitler (dcha.) y el general Petain.
Los rumores crecían: «Se afirma que el general Enzo Galviati dirigió la operación del cementerio de Milán y que posee los restos mortales del Duce, enterrados en el jardín de una casa de Milán». «El cadáver de Mussolini está oculto en la isla de Brissago, en el lago suizo», podía leerse en ABC, en agosto del 46. Pero nada. Las noticias eran cada vez más rocambolescas, como aquella que informaba de que un grupo de «carabinieri» llegó a abrir el ataúd de otro muerto, en medio de un funeral, pensando que allí se encontraba el dictador. O aquella otra que aseguraba que uno de los detenidos había contraído «infección cadavérica» al tocar el cuerpo «parcialmente descompuesto» Mussolini, relataba este periódico.
Los restos del ex dictador, sin embargo, estuvieron desaparecidos varios meses, hasta que el sacerdote de SantŽAngelo informó al arzobispo de Milán, Ildefonso Schuster, de que él tenía el cuerpo de el «Duce», y éste a su vez al Gobierno.
Mussolini, en un armario
Las autoridades eclesiásticas y el Gobierno decidieron esconder el cadáver en el convento de Cerro Maggiore, provincia de Milán. O por lo menos, lo que quedaba de él, a causa de las mutilaciones y el avanzado estado de descomposición. Estuvo oculto debajo de altar hasta que el mal olor obligó al superior a trasladarlo a un pequeño armario, donde permaneció muchos años. El Gobierno italiano no quería devolver el cuerpo a la viuda de Mussolini, ni contemplaba la posibilidad de brindarle un funeral público.

ABC
Mussolini, en 1936
Así permaneció, en el más absoluto secreto, mientras los diarios seguían llenándose con extrañas especulaciones acerca de su paradero.
En 1957, el Gobierno consideró que había llegado la hora de devolver los restos a la familia, que decidió darles por fin sepultura en la capilla familiar de San Cassiano. «Soy un hombre acabado, mi estrella se ha eclipsado», dijo Mussolini cuatro días antes de morir. «Sólo me apetece leer y esperar a que se cumpla mi destino». Y se cumplió, pero más de una década después.
ABC.es
 

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26/11/1939 - la aldea soviética de Mainila (40 km al NO de Leningrado, y 120 km al SE de la frontera con Finlandia) es bombardeada por la artillería soviética (Incidente de Mainila. La URSS acusa de ello al ejército finlandés, lo que sirvió de pretexto para iniciar la Guerra de Invierno
fuente:http://www.hoyenlahistoria.com/
 
En la fecha, el tipo que dice en el cartel, iba manejando camión de suministros a las líneas del frente cuando fue parado y rodeado por 50 soldados alemanes. Ovcharenko tomó 3 granadas y un hacha que tenía en la cabina y se bajó repartiendo hachazos matando al oficial a cargo y a 20 soldados en poco tiempo (imagino con las granadas), el resto de los alemanes salieron corriendo y el tipo los persiguió por 3km a los hachazos limpios hasta matar el segundo en comando.
Cuando Stalin le dio la Medalla de Oro al Héroe de la Unión Soviética y le preguntó si quería algo, Ovcharenko le dijo: "Una Ametralladora, así no tendré que correr tan lejos para matar fascistas".

 

Leutnant

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En la fecha, el tipo que dice en el cartel, iba manejando camión de suministros a las líneas del frente cuando fue parado y rodeado por 50 soldados alemanes. Ovcharenko tomó 3 granadas y un hacha que tenía en la cabina y se bajó repartiendo hachazos matando al oficial a cargo y a 20 soldados en poco tiempo (imagino con las granadas), el resto de los alemanes salieron corriendo y el tipo los persiguió por 3km a los hachazos limpios hasta matar el segundo en comando.
Cuando Stalin le dio la Medalla de Oro al Héroe de la Unión Soviética y le preguntó si quería algo, Ovcharenko le dijo: "Una Ametralladora, así no tendré que correr tan lejos para matar fascistas".


Jaaaaaaaaaaajjajajaaaaaaaaaa roftlmaoroftlmaoroftlmao.... Estos Ivanes y sus fabulas.


Se bajó del camión -rodeado por 50 tipos-, tiro tres granadas, mató de un hachazo al comandante, fulminó a 20 soldados paraliticos y corrió al resto -los otros treinta soldaten del escuadron de retardados- por 3 km, donde también azurró al segundo al mando... Si. Con un hacha...



Baranov y Kozhedub son unos giles al lado de Ovcharenko.


Por éso uno ve a los veteranos de la Gran Guerra Patriotica y tienen medallas hasta en las orejas. Créo que ganaban una por sobrevivir.
De hecho, en casa tengo una medalla conmemorativa de la victoria en Berlín, a un fulano que permaneció en el ejército 30 años -desde terminada la guerra!!!- (jaaaaaajajajaaa SON UNOS CAPOS). La conseguí de un ucraniano que vendía rezagos de la 2ª GM. Tenía un balde entero de medallas super jodidas de los soviéticos; Una para cada nimiedad o fabula.

A Ovcharenko, después lo deben haber hecho cosmonauta por lo menos.

:D



Saludos!!!
 
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Alemania debate conservación de los edificios del nazismo
Obras en la “tribuna Zeppelin” de Núremberg reabren la discusión


La inversión de € 70 millones necesaria para restaurar la “tribuna Zeppelin” de Núremberg, escenario de los multitudinarios congresos del partido nazi, reabre en Alemania el debate latente sobre el mantenimiento de los edificios del horror hitleriano.

Desde hace años, la tribuna desde donde Adolf Hitler se dirigía a los miembros de su partido y presenciaba grandiosos desfiles en su honor, presenta problemas de impermeabilización y estructura, que ponen en riesgo la seguridad de los visitantes.

Según las cifras aportadas esta semana por el diario bávaro Süddeutsche Zeitung, las obras de rehabilitación ascenderían a € 70 millones (unos US$ 95 millones), coste que ha enfrentado a quienes se muestran reticentes a recordar el pasado y a quienes defienden la importancia de respetar la historia de un monumento que recibe 200 mil visitantes al año.

El régimen nazi acabó hace más de medio siglo y hoy numerosos edificios y construcciones se encuentran en una situación similar a la tribuna del campo Zeppelin, mientras que otros han sido completamente transformados, borrando su lugar en la historia.

Es el caso, por ejemplo, de la antigua prisión de Spandau, situada en el oeste de Berlín, y en cuyo emplazamiento se alza actualmente un centro comercial.

Construida en 1876 como cárcel militar, fue posteriormente utilizada para el arresto de civiles, pero no fue hasta pasada la segunda guerra mundial cuando alcanzó relevancia internacional.

Allí fueron enviados varios de los dirigentes más importantes del nazismo condenados en los juicios de Núremberg.

El preso de más larga estadía fue Rudolf Hess, jefe del partido nazi y lugarteniente de Hitler, quien, condenado a cadena perpetua, fue durante dos décadas el único inquilino de Spandau, hasta que se suicidó en 1987.

Tras su muerte, la prisión, cuya dirección rotaba mensualmente entre las cuatro potencias aliadas, fue derruida y sustituida por el actual centro comercial.

En otras ocasiones, el país ha optado por mantener, sin alterar, el recuerdo de la guerra.
Un ejemplo son las iglesias de San Nicolás en Hamburgo o la Gedächtniskirche de Berlín (en alemán, iglesia del recuerdo) destruidas tras la operación Gomorra y la batalla de Berlín, respectivamente.

Tras el final de la contienda, ambas ciudades decidieron conservar intactos sus muros medio derruidos y sus piedras ennegrecidas como memorial.

A veces, en ausencia de ruinas visibles, simplemente un cartel alerta de lo que, en apariencia, no tiene nada de particular, como el aparcamiento berlinés bajo el cual se extiende el búnker donde Hitler y su cúpula pasaron sus últimos días.

El 2 de mayo de 1945, las tropas soviéticas entraban en el refugio donde Hitler y Eva Braun se habían suicidado horas después de contraer matrimonio, y donde Magda Goebbels, esposa del ministro de propaganda, Joseph Goebbels, envenenó con cianuro a sus seis hijos para después quitarse la vida junto a su marido.

Los restos del búnker fueron parcialmente derruidos por las tropas soviéticas en 1947, quedando en el olvido hasta que en 1988 el gobierno de la República Democrática Alemana (RDA) construyó un complejo de apartamentos sobre él.

También ha quedado relegada al olvido la colina de Teufelsberg, en la localidad berlinesa de Grunewald.

Originalmente una escuela técnica militar nazi, su solidez hizo imposible su demolición completa, por lo que empezó a cubrirse de escombros provenientes de otros edificios de la ciudad hasta que se convirtió en el punto más alto de la capital.

Durante la guerra fría, la Agencia Nacional de Seguridad estadounidense (NSA) construyó en su cima una estación de escucha electrónica, pero con la caída del muro quedó completamente abandonada hasta que fue adquirida por el director de cine David Lynch.

El director de Terciopelo azul anunció en su día la intención de construir allí un centro de meditación trascendental, movimiento al que pertenece, aunque hasta el momento sirve como lugar de esparcimiento para los berlineses.
Porsche y los nazis
El pueblo natal de Ferdinand Porsche –el inventor del Volkswagen “escarabajo” y fundador de la conocida marca de coches– ha eliminado su nombre de los carteles que dan la bienvenida a la localidad, por su implicación en el nazismo y su pertenencia a las SS. Porsche (1875-1951) nació en el seno de una familia de la entonces minoría alemana en la localidad checa de Vratislavice nad Nisou, cuando aún estaba bajo la soberanía del Imperio Austro-húngaro con el nombre de Maffersdorf. Hoy es parte de la ciudad de Liberec.
(EFE)
 

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Así fue el asaltó al submarino U-110 en el que se confiscó la máquina Enigma
Tras una corta batalla, el abordaje sirvió para comprobar la magnífica cocina y la calidad de los materiales de la Kriegsmarine

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Las operaciones en el mar son siempre difíciles y el asalto del submarino alemán U-110 no fue una excepción. Este es el relato en primera persona de los oficiales británicos que capturaron la máquina codificadora Enigma (después de varios intentos infructuosos, el 9 de mayo de 1941) cuando barcos de la Royal Navy lograron capturar un submarino alemán. Hasta entonces, los submarinos habían sido hundidos o escapaban. Pero el U-110 fue abandonado por su tripulación tras un duro aunque breve combate, en la seguridad de que se estaba hundiendo.
Por los informes de los soldados implicados y el interrogatorio a los supervivientes sabemos que no fue así. Después de soportar 24 cargas de profundidad, el submarino, gravemente dañado, subió sin control a la superficie y allí se vio superado por los cañones de 4,7 y 3 pulgadas y las piezas de dos libras (pom-pom pounder) de los buques. Un obús de 3 pulgadas impactó en la torreta, matando a varios hombres y la tripulación recibió la orden de abandonar la nave. Antes, el “HMS Broadway” provocó un vertido del depósito exterior de combustible al impactar con la popa del submarino durante las maniobras de acecho.
El U-110 parecía hundirse, nadie sabía cuánto duraría
Mientras el “HMS Aubertia” recogía a los supervivientes en el agua, desde el “HMS Bulldog” se envió una lancha para abordar el U-110. No había bandera blanca, de modo que toda precaución parecía poca. Los de la lancha de abordaje llevaban armas y máscaras antigás, porque no sabían a que se iban a enfrentar. Solo sabían que el submarino debía estar hundiéndose y cualquier segundo era precioso. Con la popa sumergida y la torre tocada, nadie podía asegurar cuánto tiempo le quedaba. Quien habla desde este punto es el subteniente D. E. Balme, en el completo informe que redactó tres días después de capturar la máquina Enigma del submarino U-110, unas páginas sobre un asunto que tituló “Boarding Primrose” (el abordaje del “Primavera”, nombre en clave del U-110)
Agujeros de cañonazos en la torre
“A las 12:45 del 9 de mayo, abandoné el "Bulldog" al mando de un equipo de abordaje hacia un submarino enemigo que había salido a la superficie. La lancha que comandaba tenía una tripulación de 6 marineros, 1 telegrafista y 1 fogonero. El "Bulldog" se detuvo a barlovento del submarino y como había un fuerte oleaje traté de ganar un valioso tiempo abordándolo directamente por la banda de barlovento. El blindaje de la Torre tenía numerosos agujeros causados por el cañón de 3 pulgadas del “Bulldog” y el de 2 libras.”
“Como nadie abrió fuego sobre nuestra lancha, yo estaba bastante seguro de que no había nadie en la torre de mando. Entramos en la torreta por el lado de estribor. La escotilla estaba firmemente cerrada. (Tenía entre 18 y 24 pulgadas de diámetro, era de superficie esférica con la rueda para atornillar y cerrar, para abrir la escotilla saltaba en cuanto se accionaba una pequeña palanca).”
La sala de control estaba desierta. Todo estaba iluminado
“Bajé por la escala hacia la base de la torre, donde había una escotilla similar cerrada. ¡Debajo de esta escotilla encontré la Sala de Control desierta! Todo estaba iluminado y las puertas estancas principales hacia proa y popa estaban abiertas. Un trozo de la torre había caído sobre esta cubierta. Detectamos un ligero escape de aire en la sala de control, pero ni rastro de cloro por lo que las máscaras de gas que llevábamos fueron descartadas. Lo mismo que los revólveres, que ahora parecían más un peligro que una ventaja.”
Se formó una cadena humana para sacar todo el material
“Era evidente que la tripulación había abandonado el submarino a toda prisa. Los libros e instrumentos estaban esparcidos. Se formó una cadena humana para sacar todas las cartas y los libros. La velocidad era esencial debido a la posibilidad de que el barco se estuviera hundiendo (aunque parecía completamente seco) Di órdenes para enviar arriba todos los libros, excepto los libros de lectura, obviamente, por lo tanto fue recuperada una serie de libros de navegación aparentemente inútiles. Todas las cartas estaban en cajones debajo de la mesa de cartas en la sala de control y había también algunos libros de señales, de registro, etc. Los diagramas fueron asegurados en cubierta.”
La máquina estaba enchufada, la estaban usando al abandonar la nave
“Mientras tanto, el telegrafista se dirigió a la oficina de transmisiones (W/T), justo delante de la sala de control en el lado de estribor. Estaba en perfectas condiciones, al parecer nadie había tratado de destruir ni los aparatos ni los libros de registro. Aquí se encontraron códigos, manuales de señales, bitácoras y correspondencia en general, como si esta dependencia hubiera sido utilizada como la oficina del buque. También la máquina de codificación se encontró aquí, enchufada y como si estuvieran usándola cuando abandonaron la nave. El aspecto general de esta máquina es la de una máquina de escribir, el telegrafista pulsó algunas teclas y le pareció muy peculiar, por lo que se envió arriba. Esta oficina W/T parece mucho menos complicada que las nuestras ya que no parece tener el exceso habitual de interruptores, enchufes, perillas, etc.”
Una cámara de cine
El informe del subteniente Balme se exiende en detalles de cómo los soldados de su partida, y los de otra lancha que arribó después, trataron de amarrar y asegurar la flotación del submarino mientras continuaban registrando y recabando toda la información relevante. También que el motor de babor seguía en marcha y no era fácil desconectarleo La oficina de hidrófonos centró mucha de su atención, lo mismo que las dependencias de oficiales, donde los soldados extrajeron muchas tiras de papel, fotografías, documentos varios, cámaras fotográficas, carteras y una cámara de cine. Con ella, rodó parte de los trabajos de abordaje, pero solo después se dio cuenta de que el foco y el obturador estaban puestos de manera que nada debió fotografiarse con claridad. El motor de babor no pudo ser apagado fácilmente.
Les impresionaron la abundancia de suministros y la calidad de la ropa impermeable
Cuando llevaban 5 horas en la nave, una vez sacada toda la información posible y ante el peligro de naufragio, abandonaron el submarino, según el relato de Balme. Aun así, el oficial añade algunas reflexiones a su detallado informe. Le impresionó tanto la limpieza como el diseño y la organización (alemana, cabría decir) pero también, y sobre todo, la “magnífica cocina” y la abundancia de suministros. Destaca que le gustó el impresionante receptor de radio que podía escucharse en todo el submarino y tenía 200 estaciones de radio señaladas en el dial.
También destaca la utilización de altavoces y teléfonos en lugar de tubos para comunicación interna, incluso en la torre, así como la elegancia y calidad de las prendas de los oficiales, especialmente los impermeables. Y se lamenta de no haber registrado las dependencias de la marinería, por el poco tiempo y porque no quiso abrir las puertas estancas de la parte hundida del submarino.
¿Por qué cerraron las escotillas?
Balme elogia el “espléndido trabajo” de la pequeña tripulación que le acompañó, señalando el nombre de todos, y sostiene que a todos los que participan en un abordaje deberían entregarles una pistola automática en lugar del revolver que encuentra “engorroso y peligroso” para estas misiones.
Por último un detalle intrigante: la tripulación alemana del submarino declaró que lo abandonó ante su inminente hundimiento, y ni siquiera sabían que había sido abordado. Pero entonces, se pregunta Balme: “¿Por qué cerraron las escotillas de la torre?” Nunca se sabrá.
De los campos de concentración al U-110
j.g.c. madrid
Entre la tripulación alemana del U-110, al mando del capitán Fritz-Julius Lemp había un marinero muy especial. Además de la dotación de 47 hombres (cuatro oficiales, 15 suboficiales y 27 marineros, más el capitán) había un corresponsal de guerra. Había hecho decenas de fotos de la tripulación aterrorizada durante los ataques y la "lluvia" de cargas de profundidad, y según el testimonio de los marineros había aguantado muy bien las condiciones claustrofóbidas del U-boat. Los interrogatorios a los supervivientes muestran el respeto de la tripulación hacia su capitan, tanto como el desprecio que sentían hacia el primer oficial, Dietrich Loewe.
Muchos de los marineros habían sido enrolados a la fuerza (era su primer destino). Uno se había sometido a una operación quirúrgica seis semanas antes de zarpar y fue obligado a incorporarse. Otro tenía ideas comunistas, a pesar de lo que se le incluyó en la dotación. Pero sin duda el marino más singular era un soldado que había estado en un campo de concentración. Había sufrido en propia carne toda la abrumadora crueldad de la maquinaria represiva nazi y además en el submarino se le consignaron responsabilidades, a pesar de que la Kriegsmarine le había calificado de "irreconciliable" a la vista de los sufrimientos padecidos por su familia y por él mismo. Pero tenía el respeto de la tripulación y se mostraba casi siempre taciturno si alguno de sus compañeros hablaba de la represión en los campos.
Los interrogatorios muestran que la moral germana ya estaba minada y, en particular, las dotaciones de submarinos hablaban de la eficacia de los detectores de sonar británicos, "infalibles", de los que cada vez era más difícil escapar.
En el asalto al U-boat, el 9 de mayo de 1941, murieron 15 personas: el capitán, tres suboficiales y once marineros. El resto fueron rescatados.
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La batalla astrología de la Segunda Guerra Mundial
Hitler fue asesorado por astrólogos para diseñar sus operaciones e Inglaterra tuvo un Departamento de Investigación Psicológica, para montar predicciones astrológicas contra el «Führer»

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En el verano de 1941, durante una convención en Cleveland de la Federación Americana de Astrólogos (AFA, por sus siglas en inglés), Louis de Wohl aseguró que Hitler estaba tomando decisiones militares en la guerra bajo el asesoramiento de «los mejores astrólogos alemanes», los cuales estaban conspirando para que Alemania atacara a Estados Unidos. La invasión, según Wohl, se iba a producir en la siguiente primavera, una vez que Saturno y Urano, los dos planetas «maléficos», hubieran entrado en géminis, el signo del país entonces gobernado por Roosevelt. Así, como lo oyen.

ABC
Louis de Wohl
Esta interpretación del que fue, además de astrólogo, uno de los grandes escritores de novela histórica de siglo XX, era cuanto menos fríbola si tenemos en cuenta que en la Segunda Guerra Mundial murieron más de 70 millones de personas. Pero lo cierto es que la interpretación de las estrellas, por extraño que parezca, tuvo cierto papel en el devastador conflicto, y no solo en la mente de los jerarcas nazis.
Según comentó De Wohl a aquellos crédulos espectadores, «Estados Unidos siempre había sido objeto de graves sucesos cuando Urano transitaba por Géminis». Su evaluación «especializada» iba más allá, al asegurar que las estrellas presagiaban un inminente desastre para Hitler: «No podemos predecir una fecha exacta –añadió–, pero si Estados Unidos entra en la guerra antes de la próxima primavera, él está condenado», declaró.
El juego de los astros
Lo que nadie se dio cuenta es que la conferencia de Wohl era un burdo intento de propaganda por parte del Gobierno británico para arrastrar a la administración Roosevelt hacia al enfretamiento directo con la Alemania nazi. Quería aplastarla fuese como fuese, y los ingleses sabían que la astrología podía ser una de esas vías persuasivas, después de que el 2 de noviembre de 1939 el astrólogo suizo Kart Ernst Krafft informara al mando alemán, tras su interpretación de los astros, de que Hitler corría peligro entre los días 7 y 10 de ese mes.

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Recorte de prensa del New York Sun
Cuando el 8 de noviembre Hitler sufrió el atentado de Munich, en el que murieron ocho personas -aunque él no-, y la Gestapo comprobó que Krafft no sabía absolutamente nada de aquella conspiración, los nazis comenzaron a dar crédito a sus predicciones y establecieron un Departamento Astrológico. El objetivo era que dicha sección sirviera de apoyo a la hora de diseñar sus operaciones militares.
Pronto los ingleses tuvieron su homólogo, con Louis de Wohl a la cabeza, tras formar en septiembre de 1940 el Departamento de Investigación Psicológica, que se encargaba de crear predicciones astrológicas contra la Alemania nazi. Y como en 1937 Wohl había titulado su autobiografía, con cierto humor, bajo el título de «Yo sigo a mis estrellas», se convirtió candidato perfecto para su dirección.
Su debut como astrólogo coincidió con los bombardeos
de Londres por parte de Alemania, en una aciaga noche en la que dijo: «Cuando tenemos que vivir cerca de la muerte día tras día, percibimos mejor que todo depende, no de bombas, ni de uno mismo, si no principalmente de Dios».
Guerra psicológica
De Wohl, como empleado de la unidad de sabotaje durante la guerra (SOE), había recibido instrucciones de marchar a Estados Unidos y presentarse como un reconocido astrólogo, con el fin de derrumbar la creencia en el país de que Hitler era invencible. Y no se les ocurrió otra cosa que utilizar la predicción astrológica, tan extendida entonces.
«Un vidente ve un complot para matar a Hitler», publicó «New York Sun»
Wohl dio conferencias por todo el páis y fue entrevistado por un buen número de periódicos, bajo títulos como «Un vidente ve un complot para matar a Hitler» («New York Sun»). La prensa publicó cartas de Karl Ernst Krafft, que supuestamente había conseguido Wohl, en las que el astrólogo suizo aseguraba que Hitler no ganaría la guerra. O informes como el de «Los Angeles Times», en los que Wohl hacía sus predicciones, asegurando que, a menos que Estados Unidos se uniera en el esfuerzo de derrotar a los nazis, Alemania invadiría el país a través de Brasil.
Es como si el mundo comenzara a creer que las estrellas tenían algo que decir en Segunda Guerra Mundial. Wohl, que ganó mucho crédito, no vacilaba en hacer predicciones más puntuales, algunas de la cuales parecían cumplirse. El mundo entero se vio contagiado por esta fiebre de pronósticos: un periódico de El Cairo publicaba las profecías de un astrólogo egipcio sobre la caída de Hitler, en Nigeria ocurría lo mismo con un sacerdote y en Sierra Leona con un astrónomo.
Astrólogo aficionado
Nadie sospechaba que los informes publicados por la prensa fueron filtrados por el MI5 o que la carta de Krafft era una invención. Y ni que el joven novelista nacido en Berlín era un astrólogo aficionado que, en momentos de penuria económica, había aprovechado esta afición para sacar dinero como vidente entre los círculos más poderosos de Londres.
Wohl hizo dinero en Londres como vidente de los círculos más poderosos
Dada naturaleza de su clientela, que incluía diplomáticos extranjeros y personal militar, llamó la atención del MI5, que lo reclutó para su Departamento de Investigación Psicológica, que, por otro lado, estaba formado por él solo como una herramienta de propaganda.
¿El objetivo? Asustar a los alemanes, a quienes el destino de las estrellas, como demostraba su propio departamento astrológico, no era algo que les despreocupara. Las estrellas «hablaron», pero ni Hitler murió pronto, ni Alemania perdió la guerra de inmediato. Aún tuvieron que pasar cuatro años más… y producirse millones de muertos.
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04/12/1939 - Argentina exige que la URSS sea retirada de la Liga de Naciones. Ante la invasión soviética a Finlandia, Argentina reclama la expulsión de la URSS de la Liga de Naciones e insta a los miembros a prestar ayuda a los fineses. Aprovechando la ocasión, los británicos hacen planes para enviar una fuerza expedicionaria de ayuda a Finlandia, que desembarcaría en el puerto Noruego de Narvik y se dirigiría a Finlandia, pero pasando por los yacimientos de hierro suecos con el propósito de destruirlos para detener las exportaciones de hierro a Alemania.
1940 - Segunda guerra mundial: Gran Bretaña moviliza a las mujeres.
1942 - en Varsovia ―en el marco del Holocausto judío―, Zofia Kossak-Szczucka y Wanda Filipowicz se integran en la organización Żegota.
1943 - Segunda Guerra Mundial: El líder de la resistencia yugoslava, el mariscal Tito, proclama el gobierno democrático yugoslavo en el exilio.
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05/12/1941 - Gran Bretaña declara la guerra a Finlandia, Hungría y Rumanía.
1941 - el General Zhúkov dirige un contraataque para romper el cerco durante la batalla de Moscú.
1944 - en Italia ―en el marco de la Segunda Guerra Mundial―, tropas británicas ocupan Rávena.
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06/12/1941 - en el marco de la Segunda Guerra Mundial, el Reino Unido declara la guerra a Finlandia por su apoyo a la Unión Soviética durante la Guerra de Continuación. El Reino Unido y Finlandia estarán en guerra hasta el final de la Segunda Guerra Mundial.
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Scapa Flow: buceando en las tinieblas de la historia

“Usted ha violado el honor común y las tradiciones de honor de los marinos de todas las naciones. Con un armisticio en marcha, reanudó las hostilidades sin previo aviso al izar la bandera de Alemania en los buques internados y procedió a hundirlos y destruirlos”.
Discurso del almirante Fremantle, al almirante Reuter. Estos, acompañaban a su almirante firmes en la cubierta del barco. Callaban y miraban inexpresivamente la escena.
“Diga a su almirante que no puedo aceptar los términos que contiene su discurso y que mi sentimiento es muy diferente. Yo soy el único responsable del acto realizado, y estoy seguro de que, en mi lugar, cualquier oficial británico hubiera actuado de la misma manera”

Respuesta del almirante Von Reuter a la perorata de Fremantle.

Los naufragios de Scapa flow aparecen como una de las zonas de hundimientos intencionados más grande de la historia naval mundial. En ninguna otra parte hay un yacimiento submarino con tal concentración de buques de porte y de guerra de principios del siglo XX. En su conjunto representan la vanguardia de la tecnología contemporánea de principios de siglo, testigos históricos de excepción de una época. Las circunstancias que rodearon el hundimiento están bien documentados científicamente por los responsables de cultura de las administraciones y asociaciones proteccionistas Británicas (el resultado es todo un ejemplo a seguir entre sostenibilidad, difusión y protección del legado cultural entre administración pública, sociedad civil y universidad). Poner en valor esa cooperación es uno de los objetivos de este artículo. Al final el beneficiario final, de forma tangible es la sociedad y el ciudadano. Los buzos que pueden contemplar aquellos vestigios, y por último y fundamental; los propios yacimientos. Su conservación, la de pecios de este siglo XX, y su tratamiento arqueológico los hacen ser resultado pionero de una política cultural intelignte. Esos barcos de hierro y acero, resultaron importantes para la historia en su momento. Con el paso del tiempo lo serán, aún más. En reconocimiento de esta importancia, los restos del Dresden, Brummer, Kolnm Karlsruhe, Kronprinz Wilhelm, König y Markgraf han sido protegidos como monumentos programados. Mediante sentido común y una sensibilidad dirigida a la sostenibilidad. Y es que cualquiera visitante y buceador, puede ayudar activamente informando sobre los descubrimientos de nuevos sitios, o los materiales arqueológicos que encuentren en el subsuelo marino. Estas informaciones se complementan en el proyecto ScapaMap, ayudando a registrar los ya existentes a las autoridades competentes. Si desea participar activamente en proyectos de grabación documental, también se puede participar en proyectos organizados dirigidos por la Sociedad de Arqueología Náutica (NAS). Para los no buceadores, se le facilita un tour mediante ROV (Roving Enterprises Eye) o se puede visitar el Centro de Interpretación Lyness. El caso es facilitar el acceso a la historia por los medios existentes. Pero sin duda alguna los que más disfrutan de Scapa son los buceadores deportivos. Estos pueden disfrutar y respetar de estos restos, pero el daño de los yacimientos es ilegal, de hecho es curioso, pero muy pragmático y disuasoriio ver las boyas que señalan en la superficie marina, la localización de los pecios. Avisan de las sanciones qu podría acarrear cometer un delito en un yacimiento arqueológico submarino. Y funciona. Protección, historia y buceo. Poderosa combinación de futuro. La gestión y su uso. La localización y utilización de nuevas tecnologías para su documentación y colaboración con la sociedad civil para su preservación y aprovechamiento, hacen del caso de Scapa Flow un ejemplo excepcional en el mundo. . Veamos el caso de éxito de Scapa Flow y su tutela y gestión pública, que hacen de la base naval de las Orkney un lugar fértil para la población y para su historia. Incluso la red de difusión del yacimiento, tiene una importante labor de utilización de las nuevas tecnologías aplicada a la arqueología, la divulgación en 3D que puedes perfectamente consultar desde casa, conectado a una red. En la misma te encuentras el scaneado de los yacimiento submarinos, sujeto a un grafismo y una información histórica acerca de los pecios, que facilita la elaboración de posibles rutas de buceo sobre los mismos (proyecto ADUS) haciendo del conjunto monumental un ejemplar círculo de investigación, intervención arqueológica, puesta en valor y difusión mediante nuevas tecnológicas del lugar. Veamoslo. Pena que en su momento, a principios de siglo no vislumbraran de la importancia arqueológica e histórica del yacimiento. Muchos de los acorazados de la flota imperial alemanana hundidos alí, desaparecieron. Veamos el porque y contemplemos su historia…


Boya señalización del pecio del Royal Oak, Scapa Flow. En la misma se determina mediante un gráfico, de las sanciones a las que somete el que bucee en cualquier pecio protegido por la ley del país.

Buzos realizando operaciones submarinas en Scapa Flow
Buena parte de los buques de guerra alemanes rescatados en Scapa Flow corrieron la misma suerte hace años, cuando no se daba la importancia que tenía al legado histórico; aunque parezca mentira, su final fue el desguace. A veces, su blindaje llegaba a 12 pulgadas de espesor y aquello en términos económicos, para los implacables “chatarreros” de la época, era un negocio más que apetecible. No tardaron mucho en hincarle el diente. Inconscientemente, y llevados por la “miopía” usurera del momento, rescataron del fondo de la bahía a aquellos monstruos de hierro, testigos únicos y actores principales de una época, con el único destino de ser desguazados. De desaparecer. Los beneficios potenciales para los “chatarreros” eran notables. Para los historiadores y amantes del patrimonio, aquello fue una triste cacería llevada a cabo por el mercantil sr Knox.

Cuando el acorazado Freiedrich se elevó del fondo del mar, y se desguazo, produjo 18.943 toneladas de metales ferrosos y 774 toneladas de plomo, latón. bronce y cobre. Esta chatarra se vendió por un total 134.886 libras esterlinas de la época. Más el acorazado dejo de existir para siempre. Ya no lo podrían disfrutar las generaciones venideras. El concepto de una historia, el del dominio de los mares y de una tecnología, el de su construcción naval, terminó en el desguace. Suele ocurrir desgraciadamente en muchas ocasiones con la historia.

De 74 buques alemanes de la flota alemana, se hundieron 15 de los 16 buques más importantes en Scapa Flow, 5 de los 8 cruceros, y 32 de los 50 destructores. El resto permaneció a flote o consiguieron remolcarlos hasta aguas poco profundas para embarrancar. Los buques embarrancados fueron repartidos entre las armadas aliadas, pero la mayoría de los buques hundidos fueron abandonados en el fondo de Scapa Flow. Un fondeadero protegido en las Orcadas, al norte de Escocia. Durante la Primera Guerra Mundial fue el anclaje principal para la Gran Flota británica. Con el tiempo, esta recóndita y fría base militar se ha convertido en una de las zonas de inmersiones para buceadores, más atractiva del mundo. Eso si, indispensable traje seco, al menos para los que no han bebido suficiente Campeltowmn y han crecido en las Higlands.

Con mentalidad de arqueólogo, el paso del tiempo y los siglos, podría aventurarse que esos barcos tendrán un valor histórico y arqueológico importante. Así ha sucedido. De hecho es uno de los lugares más visitados del mundo por los buceadores técnicos. Adelantándonos a los acontecimientos, el próximo 2014 se conmemoran los 100 años del inicio de la I guerra mundial. A este propósito les invitaría a que siguiesen de cerca la publicaciones y eventos de la arqueóloga portuguesa Fátima Claudino. UNESCO actualmente trabaja en la comemoración (Centenary of World War I – UNESCO will protect the Underwater Cultural Heritage from WWI from 2014 onwards); entre otras cuestiones, con el bello propósito de no olvidar tan cruento episodio, del que es capaz el ser humano. Recordar a las generaciones presentes la importancia de la paz y poner en valor el conocimiento sobre el pasado de la Primera Guerra Mundial a través de la investigación y la conservación del patrimonio que dejó atrás. Curiosamente se tiene al patrimonio cultural subacuático y sus pecios, como principales protagonistas. Una vez más.
Desde la arqueología bien sabemos, que el tiempo transcurre inexorablemente, y tras los pecios de la I guerra mundial vendrán los de nuestra guerra civil Española (sobre la cual hubo numerosos e importantes hundimientos), de la Segunda Guerra Mundial y posteriormente los naufragios de la guerra fría. Es sólo cuestión del paso del tiempo. ¿Es un debate notable para la ciencia?.¿Son las naves de acero y hierro contemporáneas, arqueología?, ¿Historia?. Claro que lo son. Porque no lo iban a ser.Como lo es una nave de guerra Napoleónica o lo es una fragata de la guerra ruso-japonesa. Forman parte de una reciente, en la que la madera es sustituida por el acero. La única cuestión, es preguntarnos ¿es patrimonio arqueológico una nave de guerra, con valor histórico hundida antes de esos 100 años que establece UNESCO por ley?. Veamos el caso de Scapa Flow. Veamos como le sientan ese centenario que están a punto de cumplir.¿En que estado se encuentran?.¿Qué es lo que ha hecho la sociedad y las autoridades Británicas en la materia?… Veámoslo. Buceemos en el fondo de su historia.

En torno Rosslyn Wemyss sugirió que la flota fuera internada en Scapa Flow con una tripulación mínima de marinos alemanes, y vigilada por la Gran Flota.Fue la combinación ganadora, y así se hizo. Una vez hundidos, la flota alemana, formó parte del olvido. Hasta que un avispado empresario británico se fijó en aquella chatarra que valdría su peso en libras. La operación de rescate de los metales de los barcos fue un negocio arduo y arriesgado, y hubo varias muertes.La historia es contada en el excelente libro de de George SC ‘Jutlandia hasta Junkyard’. Un total de 26 destructores, cinco cruceros de batalla, siete acorazados y un crucero se plantearon como objetivo de la empresa chatarrera.Para ellos no era historia. Eran simples moles de acero. Y así los trataron. Como hacen los cazatesoros con las naves hispanas allá donde los encuentran en las aguas del mundo. Como simples objetos equivalentes a dinero.
Con el paso del tiempo, y salvajadas aparte, además de otros seis naufragios alemanes, 28 británicos, 33 pecios y los yacimientos de los acorazados británicos HMS Vanguard y el HMS Royal Oak, hacen de Scapa Flow un paraíso actualmente para los buceadores y un gran yacimiento arqueológico submarino mundial. El lugar es sólo comparable con la laguna de Truk en el pacífico, base naval japonesa de la II Guerra mundial en cuyo interior fueron hundidos por la Task Force del almirante estadounidense Mitscher, una buena parte de la flota Imperial de guerra. Aún así nos encontramos con una importante diferencia. Truk, no tiene los grandes barcos de superficie de la marina de guerra que nos encontramos en Scapa Flow. La imponente sombra de los acorazados que sobrevivieron al destrozo impone en cualquier fondo marino del mundo . Los acorazados alemanes son tan grandes, (es fácil de observar en las fotografías que se adjuntan) que se necesitan varias inmersiones para bucear y hacerse una idea de la totalidad de los mismos. Los que han visto aquellas bordas interminables, en sombras que emergen entre aquellas aguas verdes plomizas, con esa presión al descender, y recorrer sus cascos saben a lo que me refiero. No son una inmersión sencilla. Algunos de ellos se encuentran al límite para el buceo de aire comprimido. El desarrollo del buceo de nitrox ha hecho que los pecios sean más accesibles. Scapa Flow tiene los tintes de santuario. Afortunadamente, para la historia y la arqueología, no todos los barcos alemanes pudieron ser desguazados, materialmente no dio tiempo a aquella brutalidad. Lo que atrae a los buceadores de medio mundo son los siete grandes barcos de la antaño Flota Imperial alemana, esos que ni Cox ni sus sucesores llegaron a reflotar. Son tres acorazados de unas 26.000 toneladas (König, Kronprintz Wilhelm y Markgraf) y cuatro cruceros de 5.000 toneladas (Brummer, Dresden, Cöln y Karlsruhe).

De la flota alemana original, sólo permanecen tres barcos de guerra: el Kronprinz Wilhelm, el König y el Markgraf, todos ellos de 177 metros de eslora y cuatro pequeños cruceros: el Dresden, el Brummer, el Köln y el Karlsruhe. Estos pecios se encuentran a profundidades entre 24 y 45 metros, con una visibilidad entre 10 y 15 metros. Una de las mayores ventajas del buceo en Scapa Flow es la profundidad asequible para el buceo. El pecio de guerra situado a mayor profundidad, el Markgraf, está localizado a 46 metros. Por lo tanto, en las islas Orkney las inmersiones presentan profundidades entre estos dos extremos. El barco más profundo se encuentra a 63 metros, es el llamado bote de John Thornton, que ha sido hundido recientemente para ser usado como parte del entrenamiento Trimix. El silencio, el frío y la soledad a 36 metros de profundidad son tan sepulcrales que no muchos buceadores osan introducirse en las entrañas laberínticas del crucero. Paseemos por ellos;
El Kronprinz Wilhelm, botado en Kiel en 1914, hermano gemelo del Konig y del Markgraf, es el acorazado más grande jamás visto. Tanto su tamaño (177 metros de eslora) como la profundidad a la que se encuentra (entre 34 y 39 metros), obligan al buceador a ser precavido. Su estructura es similar a la de un portaaviones. De los tres barcos de guerra, es el que está en mejores condiciones, a pesar haber sufrido alguna detonación, especialmente en la sala de motores. El acorazado Kronprinz se encuentra en el lado de estribor, pero casi al revés, con la mayor parte de su superestructura incrustado en el fondo del mar.El fondo del mar alrededor del yacimientos están llenos de escombros. Sin embargo, una serie de puntos de referencia son visibles para el buceador – en particular los dos mástiles que se extienden lejos de los restos del naufragio, los cuatro quillas de balance sobre el casco y los timones en la popa.
El König, botado en Wilhelmshaven en 1914, contaba con tres turbinas que le permitían alcanzar una velocidad de 23 nudos. El peso colosal de su superestructura, con sus cinco torres principales y sus cañones, es el responsable de que terminase hundido a una profundidad de 39 metros, tras haberse inundado.
El Dresden, construido en Kiel, está completamente intacto, con muchos de los objetos originales todavía en su sitio. Se encuentra entre 28 y 38 metros. Presenta gran variedad de vida marina, especialmente esponjas y estrellas de mar en las zonas menos profundas del pecio. Como uno de los más completamente intacto de los restos de la flota de alta mar, el crucero Dresden es un excelente buceo. Toda la superestructura, junto con el palo mayor se encuentra relativamente intacto. Se encuentra en el lado de babor, pero se escoró un poco, con la cubierta que sobresale por el fondo del mar. La imagen del sonar muestra claramente cómo la cubierta protectora en la proa está pelando lejos de las planchas del casco, revelando más de su interior. De nuevo nos encontramos con daños del rescate significativos, en las proximidades del motor.

El Markgraf es el que se encuentra más profundo y el más impresionante de todos los pecios. Botado en Bremen en 1913, estaba equipado con diez cañones distribuidos en cinco torres, además de contar con cinco torpedos sumergidos. Hundido a 46 metros, es la inmersión más memorable.Al igual que todos los buques de guerra, el Markgraf se encuentra prácticamente al revés. El casco se escoró ligeramente en su lado del puerto. El daño extensivo del intento de rescate de metal por parte de los soldadores es evidente, tanto en el extremo delantero y de popa, así como en la zona media del barco.

El Brummer, localizado entre 32 y 36 metros, alcanzaba una velocidad de 28 nudos y fue creado para poner minas en las rutas de los barcos aliados. Los expertos están de acuerdo en que este pecio, es el más fotogénico de Scapa Flow. Su torre de control se reconoce de forma instantánea. Debido a su deterioro, a los buceadores se les aconseja no entrar en el barco. La superestructura principal permanece intacta y los cañones todavía están en posición, apuntando a popa. En cuanto al timón, se encuentra en el fondo.
El Koln fue construido en Hamburgo y descansa entre 30 y 35 metros. Está relativamente intacto, exceptuando un agujero en la popa, sus inmensos cañones de 150 mm apuntan a un cielo inexistente, algunos se encuentran todavía armados con obuses. A través de los mamparos y corredores puede verse las estancias y pertrechos del barco tal y como quedaron el 21 de junio de 1919. Como ocurre en sus homólogos, también tiene importantes daños por parte de los soldadores del equipo de chatarreros que trabajaron sobre la flota.

El Karlsruhe se halla a tan sólo 24 metros. Debido a su superficial localización, ha sido expuesto a los efectos de fuertes tormentas. De todas formas, a pesar de su deteriorada condición, es una inmersión interesante: su escasa profundidad garantiza una vida marina muy rica.

Hasta aquí las inmensas moles de los pecios de la flota Alemana. Pero Scapa Flow es famosa por tener también en sus aguas a barcos legendarios de la marina británica. Y así, nos encontramos con el HMS Vanguard, un acorazado británico que, anclado a puerto, se hundió el 9 de julio de 1917 al estallar su pañol de municiones. El naufragio, que costó la vida a más de 700 hombres, sigue rodeado de misterio (tiene como no, una buena historia detrás del mismo): no se sabe aún si ocurrió un accidente en el polvorín del barco o si fue objeto de sabotaje por parte de un agente alemán, como sugiere el historiador escocés Lawson Wood (Scapa Flow, Dive Guide. Aquapress, 2008). En reconocimiento de la gravedad de su estado de guerra, los restos de HMS Vanguard y el HMS Royal Oak están protegidos como sitios controlados bajo la protección del militar sigue siendo la Ley de 1986. El buceo en estos pecios es ilegal sin el permiso del Ministerio de Defensa Británico. La segunda tumba de guerra es el HMS Hampshire, un crucero acorazado de 10.850 toneladas que fue hundido por una mina alemana el 5 de junio de 1916 frente a los acantilados de Marwick Head (costa oeste de las Orcadas). De nuevo, este tiene otra historia de ordágo. Su naufragio también fue dramático: murieron 643 hombres y se salvaron solo 12 en un bote salvavidas. Pero la sorpresa fue que el barco llevaba, en misión secreta, al todopoderoso mariscal de campo y ministro británico de la Guerra lord Horatio Herbert Kitchener
Y es que esta isla esta llena de naufragios. En una de aquellos promontorios, en Fair Isle, allá por el 1588, encalló El Gran Grifón. Uno de los pecios Españoles de la invencible.

Los siete pecios que permanecen bajo las aguas están protegidos bajo el Acta 1979 de áreas arqueológicas y antiguos monumentos. Las autoridades británicas lo tenían claro desde un principio. Aquello formaba parte de su historia y había que protegerlos. Desgraciadamente en nuestro país, muchos de los barcos recientes, especialmente los procedentes de la guerra civil (son numerosos los pecios a lo largo de nuestras aguas), en condiciones idénticas que las de Scapa flow, no se conoce su localización, ni su estado. A decir verdad, en ninguno de ellos se ha realizado un proyecto de investigación vinculada a una actuación arqueológica. Es una sutil diferencia del estado en el que se encuentra la sensibilizacion hacia nuestro patrimonio. En Scapa Flow, El buceo está permitido, pero es necesario solicitar una autorización para ello. Al tiempo que finalizadas las inmersiones visitamos los fantásticos museos de Stromness y de la base naval de Lyness donde se conserva viva la memoria de los acontecimientos sucedidos en las islas Orcadas desde los albores de la historia. Llegados a la superficie, una taza de sopa caliente y picante de tomate nos devuelve a la realidad, al siglo XXI. Sin embargo hemos de permanecer poco en este tiempo ya que estamos ansiosos por volver a internarnos de nuevo en las profundidades de la historia. Victoria Street y en su centro el pub del Royal Hotel, nos servirá de descanso. Fuera descansarán por los siglos, los restos de sumergidos de la historia. Los reto de la flota alemana imperial de la I Guerra Mundial.



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Falleció el francés Paul Aussaresses, defensor de la tortura


El general francés que defendió claramente el recurso a la tortura durante la guerra de Argelia y fue acusado de entrenar a oficiales latinoamericanos, falleció el martes a los 95 años de edad, anunció el miércoles en su portal la asociación de exparacaidistas franceses "Quien osa gana".

Elvira Aussaresses, su esposa, precisó a la AFP que su marido falleció en un establecimiento de convalescencia al que había ingresado después de una hospitalización. Aussaresses fue condenado en Francia en 2004 por apología de la tortura, tras haber defendido en un libro su uso durante la guerra de Argelia (1954-1962).

El oficial había enseñado en los años 60 en el campamento de los Boinas Verdes de Fort Braggs (Carolina del Norte) “las técnicas de la batalla de Argel” relativas especialmente a la tortura.

En 1973 fue nombrado agregado militar de Francia en Brasil, entonces bajo la dictadura militar.

Posteriormente fue acusado por el general chileno Manuel Contreras, fundador de la Dina, la policía secreta del régimen de Augusto Pinochet, de haber entrenado en esa época en Brasil a oficiales chilenos y de otros países latinoamericanos. Las declaraciones de Contreras figuran en el documental de la cineasta francesa Marie-Monique Robin “Escuadrones de la muerte, la escuela francesa”.

Los funerales de Aussaresses serán celebrados el 10 de diciembre en La Vancelle, pueblo del este de Francia en el que vivía, según la asociación.

El general Aussaresses, que dirigió los servicios de inteligencia franceses en Argel durante la guerra de Argelia, fue condenado por apología de la tortura al cabo de un proceso que hizo correr ríos de tinta en Francia.

En 2001, el oficial admitió en su libro “Service spéciaux, Algérie 1955-1957″ (Servicios especiales, Argelia 1955-1957) que había practicado la tortura, afirmando que la misma era “tolerada, cuando no recomendada” por los políticos.

Sostuvo que la tortura “se torna legítima cuando la urgencia se impone”.

“Era raro que los presos interrogados por la noche siguieran estando vivos al alba. Hablaran o no, eran neutralizados en general”, agregó.

Sus confesiones, acompañadas de una entrevista, desataron una tempestad política en Francia, donde el entonces presidente Jacques Chirac, que fue teniente en Argelia, se declaró “horrorizado” por tales declaracions públicas.

Nacido el 7 de noviembre de 1918 en Saint Paul Cap de Joux (suroeste de Francia), Paul Aussaresses se enroló voluntariamente en 1941 en los servicios secretos franceses. Posteriormente participó en la creación del brazo de los servicios de inteligencia exterior. En tanto que jefe de batallón de paracaidistas, sirvió después en las fuerzas francesas en Indochina.

En 1957, el general Jacques Massu, comandante de la 11ª división de paracaidistas, le encomendó el restablecimiento del orden en Argel. Allí dirigió lo que él mismo llamó “un escuadrón de la muerte”, encargado de realizar detenciones nocturnas, seguidas de torturas y de la eliminación de determinados detenidos.

Enseñó después en la escuela norteamericana de Fort Braggs, antes de asumir en 1966 el comando del Primer Regimiento de Cazadores Paracaidistas.

“¿Si me ha planteado problemas la tortura? Yo digo que no. Me habitué a todo eso”, afirmó el general a principios de los años 2000.

Paul Aussaresses sostuvo siempre que sus actos fueron cometidos con el aval de su jerarquía y de las autoridades políticas.

La publicación de su libro y el reconocimiento de la utilización de la tortura por el ejército francés contribuyó a modificar la percepción en Francia de la guerra de independencia de Argelia, conflicto que las autoridades francesas siguieron llamando “los acontecimientos de Argelia” hasta 1999, fecha en la que los diputados reconocieron que hubo una “guerra”.
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Descubren un enorme submarino japonés hundido cerca de Hawaii

El submarino japonés I-400, el más grande navío sumergible de la Segunda Guerra MUndial. (Wikimedia)

A pocos días del aniversario 72 del ataque japonés a la base estadounidense de Pearl Harbor, Hawaii, agresión que desató la entrada de Estados Unidos en la Segunda Guerra Mundial, científicos han descubierto un interesante artefacto, testimonio histórico y tecnológico de gran valor sobre aquellos años de tensión, violencia y muerte.

Los nvestigadores descubrieron en las costas de Hawaii un submarino japonés hundido, un formidable navío de la época de la Segunda Guerra Mundial cuya ubicación había permanecido en el misterio por décadas.

Se trata de un submarino de la clase ‘Sen-Toku’, una joya de la Marina de guerra del Japón imperial y el de mayor tamaño de todos los submarinos de la Segunda Guerra Mundial. También conocidos como la clase I-400, de los que solo se terminaron tres submarinos, medían casi 400 pies de largo, podían transportar y lanzar hasta tres aviones y tenían capacidad de navegar miles de millas sin recargar combustible.

Estas enormes naves eran capaces de recorrer el equivalente a una y media veces la vuelta al mundo sin necesidad de repostar. Por ello, una de las misiones para las que fueron concebidos fue el ataque al Canal de Panamá, instalación clave en el esfuerzo militar de Estados Unidos contra Japón. Incluso se especula que las fuerzas japonesas planearon usar esos submarinos para lanzar ataques químicos o bacteriológicos contra importantes ciudades portuarias de Estados Unidos.

Solo dos submarinos de la clase ‘Sen-Toku’, el I-400 y el I-401, llegaron a ser operacionales (el tercero sólo se equipó como transporte de combustible) y el avance de las fuerzas estadounidenses al final de la guerra contra Japón hizo que el ataque al Canal de Panamá fuera irrelevante. Así, la Marina de Japón decidió utilizar sus submarinos en contra de portaviones estadounidenses, pero la contienda armada llegó a su fin antes de que ese ataque se realizara.

De esta forma fue como el I-400 y el I-401 cayeron en manos de las fuerzas de Estados Unidos en agosto de 1945, quienes se sorprendieron de su tamaño colosal, más del doble que el de los submarinos estadounidenses. Los submarinos ‘Sen-Toku’ tenía avances tecnológicos considerables y la Marina estadounidense procedió rápidamente a su inspección. Ambos navíos fueron llevados a Hawaii.

En los meses posteriores al fin de la guerra, la Unión Soviética, hasta entonces aliada de Estados Unidos, exigió acceso a los submarinos japoneses capturados. Para evitarlo, y prevenir que secretos tecnológicos fueran conocidos por los soviéticos, la Marina de Estados Unidos decidió hundir al I-400 y al I-401 tras inspeccionarlos a fondo. Así, en 1946 ambos navíos fueron hundidos con torpedos lanzados desde un submarino estadounidense, en aguas cercanas a la isla de Oahu, en Hawaii.

Los restos del submarino japonés I-400 hallados por científicos en el fondo del mar. (Reuters)

Desde entonces se perdió el rastro de lo que quedó de esos poderosos navíos, en parte porque las propias autoridades estadounidenses negaron saber la ubicación de sus restos para tratar de frenar indagaciones por parte de los soviéticos.

Décadas después del fin de la Guerra Fría, en 2005 se ubicaron los restos del I-401, pero la suerte del I-400 siguió en el misterio.

Hasta ahora, cuando de modo accidental se descubrió lo que quedó del I-400 a 2,300 metros de profundidad. Los nvestigadores estudian lo que quedó del titán hundido mediante pequeños submarinos de investigación de aguas profundas del Laboratorio de Investigación Submarina de Hawaii. El anuncio del descubrimiento se hizo hace apenas unos días por parte de funcionarios de la Administración del Océano y la Atmósfera (NOAA) y del Departamento de Estado, en colaboración con representantes del gobierno de Japón, explicó Reuters.
fuente:http://es-us.noticias.yahoo.com/blo...o-japonés-hundido-cerca-hawaii-213546037.html
 
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