Equipo y materiales del Ejército, obsoletos, advierte el general Galván
Los radares sólo funcionan tres horas; pide ampliación de 32 mil millones a su presupuesto
Roberto Garduño y Enrique Méndez
El general Guillermo Galván Galván, secretario de la Defensa Nacional, advirtió a los integrantes de la Comisión de Defensa de la Cámara de Diputados, en reunión privada realizada el viernes pasado, que los equipos y materiales de guerra del Ejército Mexicano son obsoletos. El jefe militar dijo a los legisladores que lo único que sirve es el armamento, los vehículos y aviones que se ven en el desfile militar del 16 de septiembre, confiaron asistentes al encuentro.
Galván solicitó una ampliación de 32 mil millones de pesos al presupuesto de las fuerzas armadas para adquirir aeronaves, renovar la flotilla de Hummers y cambiar los radares, que actualmente, reconoció, sólo operan tres horas al día, lo cual implica que cualquier nave fuera de ese periodo puede ingresar al espacio aéreo sin ser detectada.
Solicitó, también, 7 mil millones de pesos para seguridad interna, petición que fue rechazada inicialmente por los diputados, porque –aseguró a este diario uno de los legisladores presentes en la reunión– esas tareas sólo corresponden a la Procuraduría General de la República y a la Policía Federal Preventiva. Galván dijo además que uno de sus objetivos es incrementar en 500 pesos el sueldo mensual a la tropa.
Renovarse o morir
Ayer, al reunirse con la Junta de Coordinación Política, el general secretario reiteró la solicitud presupuestal con el fin de renovar aviones, así como otros vehículos y material de guerra obsoletos.
El viernes pasado, el general Galván convocó a los integrantes de la Comisión de Defensa a una reunión privada en el Campo Militar Número Uno, donde se apoyó en una presentación en power point para explicar que la flota de aviones de carga de la Fuerza Aérea Mexicana cumplió ya su ciclo de vida útil, y que los F-5 llegarán a esa situación a partir del próximo año.
Legisladores de PRD y PRI consultados por este diario, quienes solicitaron no mencionar sus nombres debido a lo delicado del tema, señalaron que el titular de la Sedena les informó que la ampliación presupuestal permitiría sustituir los aviones obsoletos por F-16 y F-17, en un plazo máximo de cuatro años.
Sobre el tema de los radares, se les dijo que éstos tienen una capacidad de operación limitada a tres horas al día, periodo en el que pueden detectar vuelos irregulares, lo cual fue interpretado por los diputados como una grave deficiencia en el control del espacio aéreo mexicano, pues fuera de ese tiempo cualquier nave que pase por el territorio nacional puede hacerlo sin restricciones.
El secretario de la Defensa Nacional también explicó, señalaron los legisladores, que se requiere de una fuerte inversión para sustituir vehículos, específicamente la flotilla de Hummer, que también han cumplido con su periodo de operación.
Inclusive, en una expresión que causó el asombro de los integrantes de la Comisión de Defensa, el titular de la Sedena señaló que los modelos más recientes de vehículos artillados y aviones son los que se presentan en el desfile militar de cada 16 de septiembre, a los cuales se les aplica, además del mantenimiento, una mano de pintura.
Los diputados también informaron que, en el caso del armamento, Galván Galván refirió que algunos morteros con que cuentan las fuerzas armadas son de los primeros años de la posguerra. Este tipo de armas, les explicó, aún se mantienen en operación debido a que su vigencia se mide por el número de horas en que son accionadas y porque únicamente se han utilizado para las prácticas y no en combate.
Asimismo, refirió –abundaron– que se considera destinar una parte de la ampliación presupuestal al incremento a los salarios de la tropa para el próximo año, que en este caso sería de 500 pesos mensuales para los soldados rasos, que durante 2007 ya recibieron un ajuste salarial por instrucciones del jefe del Ejecutivo federal.
De manera adicional, el general Galván planteó a los legisladores aprobar una partida especial de 7 mil millones de pesos para tareas de seguridad interna, que fue rechazada de inicio por los representantes populares, quienes argumentaron que esa tarea no le corresponde de manera específica a las Fuerzas Armadas, sino a las secretarías de Seguridad Pública y de Gobernación, así como a la Procuraduría General de la República.
Inclusive le plantearon que si la Sedena requiere de recursos para garantizar la seguridad interna, en todo caso ya se le asignarían como parte del Plan México, negociado por el presidente Felipe Calderón Hinojosa con Estados Unidos, pues resaltaron que ese proyecto incluye un monto específico para ese tipo de tareas.
Sin embargo, el general Galván reconoció, señalaron los diputados, que el mencionado Plan México es limitado y los recursos se distribuirán entre distintas secretarías, como la de Relaciones Exteriores, y no únicamente serán para el Ejército, y se enfocaría a la detección y detención de contrabando, sobre todo de drogas.
Posteriormente, el secretario de la Defensa solicitó un encuentro con los ocho coordinadores de los grupos parlamentarios, que integran la Junta de Coordinación Política, con quienes se reunió ayer después de asistir a la ceremonia de izamiento de bandera en San Lázaro, en la cual participaron la presidenta de la mesa directiva, Ruth Zavaleta Salgado, y el presidente de la Junta de Coordinación Política, Héctor Larios Córdova.
La ceremonia tuvo especial relevancia porque la bandera izada este martes fue obsequiada directamente a los diputados por el titular de la Defensa Nacional.
En entrevista posterior, Larios afirmó que la visita del militar a San Lázaro se debió a la donación de la bandera y, en reciprocidad, la representación de la Cámara lo invitó a participar en los honores, así como a desayunar “y a intercambiar puntos de vista sobre el trabajo legislativo, la actualización a las leyes del Ejército y la elaboración del presupuesto” para la secretaría.
El también coordinador de los diputados de Acción Nacional afirmó en entrevista que durante la reunión se habló “en términos generales” tanto del combate al narcotráfico que realiza el Ejército, como del presupuesto para las fuerzas armadas. A una pregunta respecto de si aumentarán los recursos a la Sedena, como lo solicitó el general Galván, el panista dijo: “lo vamos a estudiar y analizar”.
Por su parte, el coordinador del PRI, Emilio Gamboa Patrón, refirió que durante el desayuno el general Galván expresó que el presupuesto destinado a las fuerzas armadas para este año fue reducido. “Nos dijo que fue bajo, que nos pedía y acudía a los grupos parlamentarios para que viéramos con simpatía el presupuesto que presentó a la Secretaría de Hacienda; nos solicitó que lo apoyemos e hicimos un compromiso en la Junta de Coordinación Política para respaldar al Ejército en el Presupuesto de Egresos”.
A su vez, el coordinador de Convergencia, Alejandro Chanona, aseguró que se justifica renovar los equipos de las fuerzas armadas, porque “una democracia vigorosa necesita un Ejército moderno”. Dijo que en el desayuno se reconoció que el Congreso de la Unión no ha autorizado una partida presupuestal para las fuerzas federales de elite integradas por el Ejecutivo, y resaltó: “Si no le damos recursos (al Ejército) seguiremos debilitándolas; así como se agota Cantarell, las fuerzas armadas en cinco años serían inútiles”.
Por su parte, el presidente de la Comisión de Marina, José Manuel del Río Virgen, informó que no sólo el Ejército requiere de una fuerte inversión para modernizar sus equipos y tecnología. La Secretaría de Marina, expuso, necesita de una ampliación presupuestal de 30 mil millones de pesos para la compra de activos: aviones, barcos, radares y construcción de astilleros, así como para apoyo a sus técnicas y procedimientos.
“Todo el sexenio anterior Vicente Fox prefirió gastar en las frivolidades de él y de su esposa, Marta Sahagún, pero confiamos en que la posición del presidente Felipe Calderón ante la Armada de México sea distinta”, expresó.